GESTIÓN DE RESIDUOS

Reutilización de desechos urbanos para producción de hongos comestibles

El proyecto dirigido por Alina Greslebien, investigadora del CONICET y ejecutado por Gonzalo Romano, becario del Consejo fue uno de los ganadores del Fondo para la Conservación Ambiental 2018.


El proyecto que se enmarca en la beca posdoctoral del Dr. Gonzalo Romano propone producir hongos comestibles a partir de la reutilización de desechos sólidos urbanos procesados en la Planta de Tratamiento de Residuos Sólidos Urbanos de la ciudad (PTRSU) de Esquel, provincia de Chubut. El mismo participó entre 80 proyectos y fue uno de los cinco ganadores del certamen que organiza el Banco Galicia en conjunto con Fundación Williams en la novena edición del Fondo para la Conservación Ambiental que invitó a investigadores y organizaciones de la Sociedad Civil a presentar iniciativas sobre “Gestión de Residuos para Prevenir y Mitigar la Contaminación”.

En referencia al premio, los investigadores dicen: “Nos sentimos muy gratificados por este reconocimiento que nos alienta no solo a los que estamos realizando la investigación en si misma sino a todas las personas involucradas con el manejo responsable y reutilización de los residuos urbanos. Este estímulo tendrá sin duda, efectos positivos para el desarrollo del proyecto y constituye también un reconocimiento para la PTRSU de Esquel”.

La PTRSU representa un caso único en toda la región patagónica, donde se reciclan una gran parte de los residuos generados en Esquel. De las 50 toneladas de residuos que se recuperan todos los meses, alrededor del 34% corresponde a residuos orgánicos compostables que, junto con los residuos de poda del arbolado urbano, pueden ser aprovechados para testear soluciones biotecnológicas que sean adaptables a los distintos escenarios socioeconómicos y climáticos a las que pueden estar sujetas otras PTRSU del país.

El compost que se genera en la PTRSU de Esquel es inocuo y utilizable en jardines y huertas, incluso se los utiliza como abono para sembrar pasto en las plazoletas de la ciudad. Sin embargo, el volumen de generación de compost es mayor al que se puede utilizar para espacios verdes.

La posibilidad de generar un modelo replicable de cultivo de hongos comestibles asociado a la industria de la separación y recuperación de residuos ofrece además una oportunidad de desarrollo local genuino para el sector productivo, dado que los insumos son de un costo muy bajo y al mismo tiempo se maximiza la rotación de los residuos, permitiendo una alta eficiencia del circuito.

Este proyecto se enmarca dentro del concepto de economía circular, que plantea que todo residuo de una industria debe ser considerado un excedente y como tal, es aprovechable por otra industria. Así, el aprovechamiento biotecnológico de la fracción compostable de los residuos urbanos surge como una necesidad del sistema de mejorar el último escalón del circuito productivo, el de la reutilización.

El propósito en última instancia es, además del aprovechamiento de residuos, la generación de renta y demanda de mano de obra capacitada. En este sentido, el proyecto contribuirá ajustando técnicas para la producción de hongos comestibles a partir de residuos, con la intención de que pueda replicarse el sistema en otras PTRSU del resto del país.

Los otros proyectos ganadores son:

“Compostando en la escuela”. Diana Bacigalupe de la Municipalidad de Rauch.

“Evaluación de la capacidad fito-remediadora de tres especies del género Adesmia”. Carlos Parera del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA – Mendoza).

“Fortalecimiento de digestores de pequeña y mediana escala para el tratamiento de residuos orgánicos en la Región Pampeana”. Mariano Butti del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA – Buenos Aires).

“Formación a cooperativas de cartoneros para la implementación de modelos GIRSU con inclusión social”. Santiago Sorroche de la Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACCyR)

Los proyectos que recibieron una Mención Especial son los siguientes:

“Rehabilitación ecológica de arroyos urbanos: Estrategias de mitigación del impacto ambiental de efluentes domésticos y residuos sólidos urbanos”.Martín Graziano, investigador asistente del CONICET en el Instituto de Ecología Genética y Evolución (IEGEBA, CONICET-UBA).

“Desarrollo y optimización de tratamientos biológicos aeróbicos-anaeróbicos de residuos orgánicos para la producción de biogás y bioabono de calidad”. Telma Eleonora Scarpeci, investigadora adjunta del CONICET en el Centro de Investigaciones y Transferencia Villa María (CONICET, Universidad Nacional de Villa María).

“Aprovechamiento de residuos de Industrias Alimenticias para la obtención de sustratos de alto valor para las Industrias Biotecnológica, Cosmética, Alimenticia y Energética”. Guillermina Bongiovanni, investigadora independiente del CONICET en el Instituto de Investigación y Desarrollo en Ingeniería de Procesos, Biotecnología y Energías Alternativas (PROBIEN, CONICET – Universidad Nacional del Comahue).

“Desarrollo de mantos biodegradables para su uso en cultivos orgánicos”. Nelio Ochoa, investigador principal del CONICET en el Instituto de Física Aplicada “Dr. Jorge Andres Zgrablich” (INFAP, CONICET – Universidad de San Luis).

“Transformación de residuos en bioenergía y biofertilizantes para el desarrollo rural sustentable”. María Mercedes Echarte, investigadora adjunta del CONICET en la Estación Experimental Agropecuaria Balcarce (EEAB) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).

Integraron el jurado de esta edición: el Dr. Jorge Tezón, Dr. en Química – UBA y Gerente de Desarrollo Científico y Tecnológico del CONICET, Andrés Napoli, Mag. en Derecho Ambiental Universidad de País Vasco, España; Director Ejecutivo de Fundación Ambiente y Recursos Naturales – FARN, Lucas Gallo Mendoza, Ingeniero Agrónomo y Magister en Ciencias Ambientales – UBA.  Área de investigación de la Estación Experimental Agropecuaria Reconquista –INTA. Miembro de la Comisión Directiva de la Red de Biodigestores para Latino América y el Caribe (RedBioLac), Susana Larrondo, Dra. en Ingeniería Química – UBA; Directora de la carrera de Ingeniería Ambiental UNSAM y Magalid Cutina, Mag. en Diseño y Gestión de Políticas Públicas FLACSO; Coordinadora de RSU de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación.

Acerca del premio

Desde el 2010, Banco Galicia lleva adelante esta iniciativa, con el objetivo de financiar y divulgar proyectos de investigación aplicada que tengan como objetivo principal la conservación del ambiente, que contribuyan al conocimiento científico y que aporten a la sustentabilidad global. El mismo se ha consolidado a lo largo de todos estos años como un referente en la temática y una oportunidad de desarrollo para la comunidad científica y las organizaciones de la sociedad civil.

El Fondo para la Conservación Ambiental cuenta con el apoyo institucional de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, de la Administración de Parques Nacionales; y este año se suma el apoyo del Ministerio de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología de la Nación debido a la temática particular de la edición.

Por Sergio Patrone Firma Paz