Cianobacterias y cinotoxinas en plantas potabilizadoras

GIANNUZZI L.

Mar del Plata

Conferencia; V Taller sobre Cianobacterias toxígenas en Argentina y I Simposio interdisciplinario sobre Cianobacterias y Salud.; 2012

Los problemas en la calidad de aguas en los reservorios utilizados para suministro público, irrigación y recreación son un hecho alarmante en nuestro país y en todo el mundo. En los últimos años se ha observado un aumento en la aparición de floraciones cianobacterianas en distintos cuerpos de agua destinados a ser potabilizados. Esto genera la colmatación de los filtros de las plantas potabilizadoras resultando ser un problema relativamente común y conocido conjuntamente con la aparición de cepas tóxicas durante una floración que pone en riesgo a la población por el consumo de aguas con cianotoxinas. La mesa de Presentación de casos ? Manejo de floraciones y Tratamiento de aguas ha sido pensada con el fin de intercambiar experiencias en forma trans-disciplinaria referidas a este problema y evaluar los avances y posibles aplicaciones de las tecnologías en nuestro medio. La potabilización de agua con alto nivel poblacional de cianobacterianas, implica dos problemáticas: la eliminación de toxinas y de metabolitos olorosos típicos como la Geosmina, MIB (metil-Isoborneol) y β-ciclocitral. El principal factor en la evaluación del tratamiento del agua para la remoción de toxinas involucra la remoción de sustancias solubles (toxinas disueltas) y suspendidas (cianobacterias). La mayoría de las toxinas son retenidas dentro de las cianobacterias durante todo su desarrollo, razón por la cual, la remoción de las células intactas es un punto crítico. Los tratamientos físicos convencionales (coagulación, sedimentación y filtración) pueden resultar adecuados para el abatimiento de toxinas intracelulares sin embargo, no son efectivos para la remoción de toxinas disueltas. Para esta fracción es necesaria la aplicación de agentes oxidantes como el cloro, ozono, agua oxigenada, así como aplicación de métodos de adsorción empleando carbón activado, entre otros. El ozono es efectivo en la destrucción de toxinas bajo condiciones específicas de dosis y tiempos de contacto. La susceptibilidad de las distintas cianotoxinas a la ozonización es microcystinas>anatoxinas>saxitoxinas. La ozonización de agua cruda conteniendo cianobacterias produce lisis celular y liberación de toxinas por lo que deben ajustarse las dosis para la destrucción total de las cianobacterias y las toxinas liberadas. Concentraciones de 1,5 mg/L de ozono resulta suficiente para destruir las toxinas presentes en 5x105 cél/ml de Microcystis aeruginosa. La cloración, es un efectivo y simple método para la destrucción de toxinas. La reacción es dependiente del pH. Para que la remoción sea efectiva, es importante que la demanda de cloro del agua sea satisfecha por la reacción competitiva de la materia orgánica. Sin embargo se presentan problemas referidos a la generación de trihalometanos. Estos métodos, aplicados en forma individual o conjunta están siendo aplicados en todo el mundo y su implementación a nivel local es claramente un desafío.