Julio Castro: maestro, periodista y militante latinoamericanista

REISIN PAMELA

Córdoba

Jornada; TERCERAS JORNADAS DE LA RED INTERCÁTEDRAS DE HISTORIA DE AMÉRICA LATINA CONTEMPORÁNEA América Latina en su laberinto: reformas, revoluciones y restauraciones.; 2023

Universidad Nacional de Córdoba Facultad de la Facultad de Filosofía y Humanidades

En el presente trabajo reconstruiremos la trayectoria del maestro y periodista uruguayo Julio Castro (1908-1977). El mismo se basa en la tesis doctoral “La configuración de la pedagogía ruralista en Uruguay y sus conexiones con la educación rural mexicana (1930-1960)” (Reisin, 2023). Para ilustrar la vida de Castro vamos a comenzar por el final porque, muchas veces, los finales son una muestra de aquello que hicieron en vida las personas. Julio Castro fue detenido, desaparecido y asesinado por agentes de la dictadura cívico militar en agosto de 1977. Tenía 68 años cuando lo secuestraron. Uno de los responsables de su secuestro fue el dictador Gregorio Álvarez, quien, según la viuda de Castro, había sido alumno suyo en su infancia (Gamundi, [1977] 2012). Tuvo dos profesiones, la docencia y el periodismo, pero de ésta última no cobró retribución alguna por sus colaboraciones (Soler Roca, 2007). Ambas actividades no estuvieron escindidas, ya que muchos de los temas sobre los cuales publicaba Castro estaban vinculados con educación, aunque no únicamente. En su trayectoria profesional, atravesó distintos cargos docentes y de inspección (Santos, 2013); entre 1951 y 1953 fue Subdirector del Centro Regional de Educación Fundamental para América Latina (CREFAL).Junto a Carlos Quijano y a Arturo Ardao, fundó en 1930 el diario El Nacional y dos años después el semanario Acción, ambos vinculados a la Agrupación Nacionalista Demócrata Social, sector independiente del Partido Nacional. En 1939 fundó con Quijano y otros intelectuales el semanario Marcha, del cual fue redactor responsable. Siguió vinculado al mismo hasta 1974, año de su clausura definitiva debido a la censura que provocó la dictadura cívico militar. Carlos Quijano (1900-1984) tuvo una gran trascendencia en la formación del pensamiento latinoamericanista en el Uruguay (Espeche, 2016) y, en nuestra investigación, sostuvimos que el vínculo que Quijano estableció con distintos funcionarios del Estado Posrevolucionario Mexicano motivó en Castro la inquietud por conocer y estudiar dicho proceso político.Fuera del ámbito laboral, una tercera ocupación de Castro, también vinculada con las dos anteriores, fue su actividad militante, tanto en el ámbito partidario como en el sindical. Participó junto a Quijano en una agrupación independiente perteneciente al Partido Nacional. Ambos dejaron de militar en el Partido Nacional antes de que éste ganara las elecciones en 1958, por diferencias con el sector hegemónico del mismo. Tras alejarse del Partido Nacional, Quijano se convirtió en uno de los impulsores del Frente Amplio, proyecto político al cual también acompañó Julio Castro. En cuanto a su actividad sindical, Castro fue miembro activo de las siguientes organizaciones gremiales: Unión Nacional del Magisterio, Federación de Asociaciones Magisteriales del Uruguay (FAMU), Confederación Americana del Magisterio (CAM), Federación Uruguaya del Magisterio (FUM), Unión del Magisterio de Montevideo (Soler Roca, 2007). Estas tres ocupaciones, la docencia, el periodismo y la militancia política y sindical, estuvieron posiblemente vinculadas con cierta característica de la personalidad de Castro: “Tenía la facultad de convocar a la gente. Tenía la facultad de llamar a la gente que lo rodeaba para transmitir algo, para crear algo” (Rodríguez, 2008:11).