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En los últimos años se ha incrementado la investigación en el desarrollo depelículas biodegradables obtenidas a partir de biopolímeros tales comoproteínas y polisacáridos, con potencial aplicación en la industria y elenvasado de alimentos. En particular, se ha puesto énfasis recientemente en eldesarrollo de materiales obtenidos a partir de exopolisacáridos microbianos.El té de Kombucha es una bebida obtenida a partir de hojas de té, azúcar, yla fermentación producida por una comunidad simbiótica de bacterias y levaduras(Jayabalan et al., 2014). Sus propiedades antioxidantes y efectos terapéuticoshan sido ampliamente reconocidos (Jayabalan et al., 2014). El producto de lafermentación de la Kombucha se compone de dos fracciones: el líquido que esconsumido como bebida probiótica, y un subproducto constituido principalmente porcelulosa bacteriana. Este material polimérico consiste en una matriz de capasmúltiples formadas por una red de nano y microfibras celulósicas, y es empleadoen aplicaciones biomédicas y farmacéuticas (Dima et al., 2017).Los métodos tradicionalesusados para el desarrollo de materiales biodegradables, se basan en la purificacióndel biopolímero de interés a partir de la biomasa total, y luego la aplicaciónde modificaciones físicas y químicas para mejorar su capacidad filmogénica y suspropiedades funcionales. El objetivo de este trabajo fue la obtención depelículas usando el subproducto sin purificar de la bebida de Kombucha comomatriz polimérica, y evaluar los efectos del glicerol como plastificante en laspropiedades del material. Este nuevo enfoque para el desarrollo de materialescontribuye a un proceso más eficiente y con menos residuos, y permite explotarlas propiedades de toda la biomasa.

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