El sujeto psicológico y la educación en el marco de la globalización de fin de siglo

NÉSTOR ROSELLI, INVESTIGADOR CONICET

IDEA (SAN LUIS)

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA EDUCACIÓN, UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN LUIS :EDITORIAL UNIVERSITARIA SAN LUIS

Lugar: San Luis; Año: 2000 vol. 14 p. 41 - 47

0327-2788

Las últimas dos décadas están signadas por el llamado proceso de globalización, que avanza raudamente y que parece preanunciar la otrora utópica sociedad universal. La globalización no es sólo la ampliación de los mercados y la creación de formas políticas, culturales y sociales a escala mundial. Es también, o ante todo, un cambio de la subjetividad, del campo psicológico, y de la identidad psicosocial.De pronto, el espacio de circulación real y virtual de los sujetos se agranda. La nacionalidad sucumbe y el mundo parece ser el escenario natural del drama humano.La tecnología hace lo suyo y así podemos interactuar sin frontera ni distancia.Pero no todo es tan idílico ni tan lineal. La hermandad universal no parece ser el corolario de este proceso. Curiosamente, a la vez se afirman las reivindicaciones subculturales, coexistiendo en una rara simbiosis la gran y la pequeña aldea.No todos participan igualitariamente de este festín universalista. Los países más pobres llegan con atraso en el furgón de cola; los sectores excluidos en las diversas sociedades asisten pasivos a una "integración" que no les llega.En este contexto, ¿qué acontece con el sujeto psicológico?, ¿qué cambios en la identidad psicosocial se operan y se operarán con las próximas generaciones?, ¿cómo se conciliarán lo uno y lo diverso?, ¿qué sujeto se construirá en un contexto de interacciones simbólicas y mediatizadas?, ¿será la lógica del costo-beneficio la vedette reguladora del intercambio social?.Para esta nueva situación, la educación tendrá que adecuar su oferta. Resulta insuficiente pensar ya en la escuela como un reducto espacial en el que docentes y alumnos se reúnen para un trabajo de tiempo limitado en torno a una currícula fija y homogénea. La idea de una educación virtual, mediatizada tecnológicamente, aparece como modelo alternativo. ¿Será excluyente? ¿Estamos en presencia de un nuevo paradigma educativo?Éstas son algunas de las preguntas a las que intentaremos, si no responder, por lo menos enunciar.