CIENCIAS BIOLÓGICAS Y DE LA SALUD
El uso de antihipertensivos es seguro en pacientes con COVID19
Investigadores del CONICET realizaron un metaanálisis de la información clínica de pacientes tratados por infección de coronavirus SARS-Cov-2 que tenían hipertensión y concluyeron que no solo no es perjudicial continuar con el tratamiento antihipertensivo sino que podría ser beneficioso.
La hipertensión es un factor de riesgo de contraer las formas más severas de la enfermedad COVID-19, por infección del virus SARS-CoV-2. Durante las primeras etapas de la pandemia actual, declarada por la Organización mundial de la Salud (OMS) el 11 de marzo, hubieron dudas en la comunidad médica acerca del uso de las drogas antihipertensivas en estos pacientes.
En un estudio publicado por Silvia Sookoian y Carlos Pirola, ambos investigadores del CONICET en el Instituto de Investigaciones Médicas (IDIM, CONICET-UBA), presentaron los resultados de un metaanálisis que incluyó los datos de 16 estudios clínicos que sumaron, en total, la evolución de 24,676 pacientes con COVID-19 que eran hipertensos.
La conclusión fue que el uso estas drogas podría tener un efecto incluso protector sobre estos pacientes ante la infección por el nuevo coronavirus. Las conclusiones fueron publicadas en la revista Journal of Infection -Revista Oficial de la Asociación Británica de Infectología-.
“Había surgido un debate muy fuerte por una sospecha de que los pacientes que tenían COVID-19 y eran hipertensos y, por ende, estuvieran usando este tipo de drogas, podrían sufrir un agravamiento del curso de la infección. Ese debate clínico alrededor del mundo llevó a que la comunidad médica se preocupe y hubieron pacientes con temor a seguir usándolas”, explica Sookoian.
Las drogas que evaluaron son las de uso más extendido como tratamiento para trastornos hipertensivos que afectan el sistema renina-angiotensina-aldosterona: los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA) y los bloqueadores del receptor tipo 1 de angiotensina II (BRA).
El debate, cuenta la investigadora, había surgido por el efecto que tienen los BRA sobre la proteína ACE2 -un receptor-, que es considerada funcional a la infección por coronavirus y que aumentaría sus niveles -al menos en modelos experimentales en roedores- cuando se dan estos inhibidores, lo que dió lugar a las inquietudes sobre su uso.
La hipertensión es una enfermedad muy extendida en el mundo, -según datos de la OMS afecta a mil millones de personas y es causa de muerte de 9 millones por año-, por lo que el manejo de este tipo de pacientes en esta situación de emergencia se hace particularmente importante. Según los datos recabados por los investigadores, “entre el 30 y 60 por ciento de los pacientes con COVID-19 que ingresaron a diferentes hospitales en el mundo presentaron hipertensión arterial como comorbilidad”.
Si bien el debate en la comunidad médica y en los pacientes se fue cerrando a medida que se reportaban grupos de casos en Europa, China y los Estados Unidos, y en base a estas conclusiones, hubo en las sociedades de cardiología del mundo la necesidad de dejar claro que los pacientes con hipertensión y COVID, no debían suspender la medicación antihipertensiva.
“La conclusión es que no sólo que estas drogas no son perjudiciales, por tanto el debate clínico está saldado, si no por el contrario, los pacientes que estaban tomando los antihipertensivos por su condición previa de salud cardiovascular, mostraron una reducción de 23 por ciento del riesgo de adquirir formas graves”, concluye Sookoian.
Por María Bocconi
Referencia bibliográfica: Pirola, C. J., & Sookoian, S. (2020). Estimation of Renin-Angiotensin-Aldosterone-System (RAAS)-Inhibitor effect on COVID-19 outcome: A Meta-analysis. Journal of Infection. DOI: https://doi.org/10.1016/j.jinf.2020.05.052