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El CONICET presente en la 49º Feria del Libro de Buenos Aires

A través de una variada propuesta de actividades lúdicas y científicas, que incluyeron talleres, charlas y juegos sobre biomedicina, robótica e inteligencia artificial, así como exploraciones en paleontología y avances en producción agraria, medicina y genética, entre otros.


El CONICET participó de la 49º Feria del Libro de Buenos Aires con actividades, talleres y postas de juegos para chicos, adolescentes y público general. Desde el viernes 25 al martes 29 de abril, más de cien científicos del Consejo llevaron a cabo diferentes propuestas vinculadas a la ciencia y la tecnología.

Invitado por Fundación El Libro, el CONICET, a través del Programa de Promoción de Vocaciones Científicas (VocAr) y el área de Ferias y Exhibiciones pertenecientes a la Dirección de Relaciones Institucionales, ofreció en espacio Zona Explora su agenda de actividades variada con talleres, charlas, juegos y oportunidades de diálogo e intercambio con los científicos. La presencia del CONICET en la feria se extendió durante cinco días en los que más de cien especialistas del Consejo llevaron a cabo propuestas interactivas para los miles de personas que visitaron el espacio y participaron de las diversas experiencias.

Con actividades lúdicas diversas, expusieron sus temas de investigación científicos del CONICET pertenecientes al Instituto de Biología y Medicina Experimental (IBYME, CONICET-Fundación IBYME), el Museo Argentino de Ciencias Naturales (MACN), el Instituto de Investigación en Biomedicina de Buenos Aires (IBioBA, CONICET-MPSP), el Laboratorio de Robótica y Sistemas Embebidos (LRSE), el Grupo de Desarrollos Biomiméticos del Centro de Investigación de Recursos Naturales (CIRN), la Sociedad Argentina de Inmunología y la Asociación Civil: ¿De qué hablamos cuando hablamos de Chagas?

Como rasgo distintivo de esta edición, cada jornada tuvo como protagonista a un grupo o instituto de investigación que, mediante postas interactivas, ofreció un recorrido dinámico por el espacio. En cada posta se presentó una actividad distinta, para que los visitantes aprovecharan al máximo la experiencia de intercambio con investigadores, becarios y técnicos del CONICET.

“Jugando ciencia” fue la propuesta con la que científicos del IBYME abordaron diferentes áreas en las que trabajan en el instituto, como reproducción, oncología, neurociencias y biología celular. Priscila Pagnotta, becaria del CONICET, expresa: “Desde el instituto intentamos, con propuestas lúdicas, generar actividades que permitan construir ideas y criterios en aquellas personas que quizás no se dedican a la ciencia”. Y agrega, respecto a la diversidad de públicos, “desde personas muy pequeñas hasta adultos mayores, fue muy enriquecedor porque nos ofrecía una comunicación diversa donde era sumamente importante variar las estrategias, pero principalmente porque las preguntas y los intereses también eran muy diferentes”.

El MACN presentó “Ciencia en el Museo: experimentá, observá y jugá junto a nuestros investigadores”, donde realizaron actividades y talleres interactivos en áreas como paleontología, limnología, nutrición vegetal y mastozoología. Al respecto, Pablo Teta, investigador del CONICET en el Museo expresa que la intención de la División de Mamíferos fue contar el trabajo que hacen y mostrar algunos de los especímenes. En ese sentido, considera importante compartirlo para que la gente se interese en su trabajo y vea que tiene muchas derivaciones.

Por su parte, el IBioBA participó con la propuesta “Descifrando la vida: genética, neurociencia y biomedicina”. Para ello, montaron una muestra para compartir algunos de los interrogantes que guían sus investigaciones: ¿Por qué dormimos? ¿Cómo viaja la información desde el mundo exterior hasta el cerebro? ¿Cómo se conectan nuestras neuronas? Y para dar respuestas, el público pudo realizar experiencias de percepción para comprender cómo viaja la información sensorial entre las neuronas; y en otro espacio mostraron cómo la mosca de la fruta, Drosophila melanogaster, ayuda a contestar la pregunta de por qué dormimos. En ese caso, pusieron lupas para observar moscas mutantes y entender sus diferentes comportamientos, lo que despertó gran interés en el público. Según cuenta Agustina Bruno Vignolo, becaria del CONICET en el Instituto: “los niños quedaron fascinados con la posibilidad de ver las moscas con las que trabajamos a través de una lupa de laboratorio”.

Bajo el nombre “Aplicaciones de IA para robots móviles”, integrantes del Laboratorio de Robótica llevaron a cabo una exhibición de robots móviles y dialogaron con los visitantes sobre la aplicación de inteligencia artificial, programación y funcionamiento de estas tecnologías. El intercambio con el público fue muy favorable y muchas personas se acercaron con genuino interés sobre los temas que están desarrollando los científicos. Según los especialistas, hubo niños y jóvenes que se llevaron una primera impresión de la idea de ciencia aplicada. Y esto es lo realmente importante para los investigadores: poder transmitir lo que hacen y generar un cambio en la percepción pública a favor de la ciencia.

Por último, el Grupo de Desarrollos Biomiméticos del Centro de Investigación en Recursos Naturales llevó a cabo la muestra interactiva “Invenciones pop up: cuando la naturaleza nos inspira” y profundizaron en el concepto de biomimética: cómo la naturaleza sirve de inspiración para desarrollos tecnológicos. Como integrante del CIRN, Lorena Setten destaca que, en su experiencia como científica, no hay “nada más lindo que poder repensar las cosas para poder llevarlo a los demás y demostrar lo que uno hace y para qué lo hace”. De su participación en la feria destacó: “Estamos sorprendidos por el entusiasmo de los jóvenes, que se mostraron muy comprometidos. Si bien la rama en la que trabajamos está hace muchos años, sigue sorprendiendo porque es tanto como nos sorprende la naturaleza habitualmente”.

Además, se presentaron investigadores del CONICET pertenecientes a la Sociedad Argentina de Inmunología (SAI) y un grupo de investigación perteneciente a la Asociación Civil: ¿De qué hablamos cuando hablamos de Chagas? En el marco del Día Internacional de la Inmunología, el 27 de abril, la SAI ofreció un “Café con especialistas”, actividad que propuso a los asistentes recorrer las distintas mesas temáticas y establecer una conversación con los científicos, para que los visitantes conozcan más sobre esta disciplina. Mientras que la Asociación Civil Hablemos de Chagas, llevó adelante el taller “Hilos y palabras para a-bordar el Chagas” con una mirada creativa, actualizada e integral sobre la problemática. A través del bordado de postales temáticas, se propusieron crear un espacio para compartir saberes, inquietudes y experiencias sobre el tema.

Como es habitual, año tras año, VocAr llevó a cabo la actividad lúdica “Armá tu científico”, que convocó a niños, jóvenes y familias a un espacio de creación y juego donde animarse a pensar qué científico querrían ser y qué les gustaría investigar, a la vez que pudieron conocer los perfiles de varios investigadores del Consejo en las fichas de “Ciencia en Juego” y acercarse a las novedades en innovación científico-tecnológica exhibidas en las fichas de “Miradas en Desarrollos”. Además, por segundo año consecutivo, “¿Quién soy en la ciencia?” y “Misión Dinos”, los juegos de mesa creados por VocAr, despertaron interés y curiosidad en los distintos públicos, que jugaron a ser científicos.

Por Florencia Verrastro

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