INVESTIGADORES
DI PIERO Maria Emilia
congresos y reuniones científicas
Título:
ARTICULACIÓN SECUNDARIA-SUPERIOR EN LA PLATA Y TANDIL DURANTE LA PANDEMIA: LAS EXPECTATIVAS ESTUDIANTILES ENTRE LA AMPLIACIÓN, LA RECONFIGURACIÓN Y LA FRAGMENTACIÓN
Autor/es:
DI PIERO EMILIA; GARRIGA OLMO SANTIAGO; MARCHEL, ANA LAURA
Reunión:
Jornada; III Jornadas de Sociología Pensar la Sociología en Tiempos de Emergencia Facultad de Humanidades Universidad Nacional de Mar del Plata; 2023
Resumen:
“La articulación secundaria-superior en La Plata y Tandil durante la pandemia: las expectativas estudiantiles entre la ampliación, la reconfiguración y la desigualdad”Di Piero, Emilia: IdIHCS/CONICET-UNLPGarriga Olmo, Santiago: IdIHCS/CONICET-UNLPMarchel, Ana Laura: FaHCE-UNLPIntroducciónLa masificación del nivel secundario y su obligatoriedad desde el año 2006 en Argentina han dado impulso a indagaciones sobre la continuidad de estudios en el nivel superior por parte de sectores sociales a los que anteriormente ese horizonte de expectativas le era ajeno. Este trabajo se propone analizar la articulación entre los niveles secundario y superior mediante una investigación comparativa en distintos establecimientos secundarios de la provincia de Buenos Aires durante la pandemia, poniendo el foco en dos cuestiones. Por un lado, en la comparación de las expectativas de estudiantes del último año de escuelas secundarias de diferente sector de gestión y que, a su vez, atienden a distintos sectores sociales respecto de la continuación de estudios. Por otro, en la incidencia de la pandemia en el proceso de decisión sobre la continuidad de los estudios. Las preguntas que nos orientan son: ¿qué diferencias existen entre esas expectativas en relación con el sector social de pertenencia y la institución educativa por la que transitan? ¿Cómo se reconfiguran las expectativas de las y los estudiantes respecto de la continuidad de estudios superiores en el marco de la pandemia?El presente trabajo se enmarca en el Proyecto “Políticas educativas, desigualdad social e inclusión: tensiones entre democratización y diferenciación en la articulación nivel secundario- nivel superior en la pandemia y pospandemia” financiado por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica[1]. En esta investigación de corte cualitativo interpretativo fueron entrevistados/as, durante el segundo semestre de 2021, 16 estudiantes del último año de una escuela de gestión estatal y una escuela gestión privada de la ciudad de La Plata y 12 estudiantes del último año de una escuela de gestión estatal y una escuela de gestión privada de la ciudad de Tandil . A su vez, realizamos entrevistas semiestructuradas a directivos y docentes del último año en cada una de las escuelas en La Plata y en Tandil y entrevistamos a actores a cargo de la implementación de políticas de articulación a nivel provincial (Dirección General de Cultura y Educación) y nacional (Secretaría de Políticas Universitarias) y en las dos instituciones universitarias con mayor peso en cada localidad como son la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y Universidad Nacional del Centro (UNICEN). En el presente artículo nos concentramos únicamente en los hallazgos a partir de las entrevistas a estudiantes.Como mencionamos, abordamos dos ciudades bonaerenses, La Plata y Tandil, a los fines de analizar un mismo proceso en localidades con características diferentes y con universidades que responden a distintas oleadas de ampliación de ese nivel educativo.En el caso de La Plata, se trata de una ciudad con perfil administrativo y universitario que es, a su vez, la capital de la provincia de Buenos Aires y se ubica a 60 km de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (la Capital Federal del país). Cuenta con una de las universidades más antiguas de Argentina, como es la Universidad Nacional de La Plata, creada a principios del siglo XX. Con respecto a Tandil, se trata de una ciudad con perfil agropecuario y turísitco que es parte del “interior” de la Provincia, ubicada a 430 km de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La Universidad Nacional del Centro fue fundada el el último cuarto del siglo XX y constituye un importante polo educativo a nivel provincial. Respecto de las cuatro escuelas abordadas, se trata de establecimientos de diferente sector de gestión que, a su vez, atienden a distintos sectores sociales en cada una de las ciudades. Una de las escuelas de la ciudad de La Plata es de gestión estatal. La misma, con orientación en Ciencias Sociales, se encuentra en el margen del caso urbano de la ciudad y es pequeña, por lo que quienes la transitan se conocen entre sí. Muchos/as de los/las estudiantes son “del barrio” y han cursado el nivel primario en el mismo establecimiento. La otra escuela de La Plata abordada es de gestión privada, se encuentra en un predio con un espacio verde amplio, no recibe ningún tipo de subvención y es laica. Cuenta con tres orientaciones (Economía y Administración, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales) y tiene al deporte como pilar. A su vez, esta institución de doble jornada ofrece menú elaborado por nutricionistas, tiene alta carga horaria de inglés (en 2018 fue nombrado Centro de Preparación de los exámenes de Cambridge) y presenta uno de los costos más elevados entre las escuelas secundarias de la ciudad. Por lo antedicho, podemos indicar que se trata de una escuela de elite. En relación a las escuelas de la ciudad de Tandil, una de ellas es de gestión estatal, se encuentra en la periferia de la ciudad y es pequeña. El otro establecimiento seleccionado en allí, cuya orientación es en Comunicación y en Ciencias Naturales, es privado y laico con un fuerte foco en el autoconocimiento y en la educación emocional. El establecimiento es considerado de elite y cuenta con una de las matrículas más caras de la ciudad. De este modo, las escuelas presentan características socioeducativas disímiles entre sí pero fuertemente homogéneas con respecto a la composición interna de su matrícula. Siguiendo la conceptualización de Saraví (2015), se trata de establecimientos que se aproximan a la caracterización como escuelas totales a las que asisten estudiantes de los sectores más altos, en el caso de las escuelas privadas, y escuelas acotadas a las que asisten estudiantes de sectores populares y provenientes de hogares con bajo clima educativo , en el caso de las estatales. Estas dos conceptualizaciones son “dos tipos ideales que representan los extremos de la fragmentación escolar y que reflejan nítidamente los contrastes y consecuencias de dicha fragmentación” (2015: 61). Las diferencias entre una y otra, y las desigualdades que se generan, son resultado no solamente de las características de los/las estudiantes que asisten, sino también de las actividades que allí se realizan. Para los/las jóvenes que concurren a la escuela acotada “la escuela ocupa un tiempo relativamente acotado (…) la escuela es una actividad más entre otras” (2015: 91). Por el contrario, la escuela total implica una “experiencia totalizadora estructurada en torno a la escuela” (2015: 85). Consiste en una actividad central de la vida de los/las jóvenes pero que, al mismo tiempo, dada su fuerte homogeneidad social se convierte para muchos/as estudiantes “en una atmósfera agobiante e incluso asfixiante” (2105: 100).Con respecto a las decisiones metodologías, el plan original de trabajo de campo debió ser reformulado debido a que el 19 de marzo de 2020, el Poder Ejecutivo de la Nación Argentina publicó en su Boletín Oficial el decreto de emergencia sanitaria por Covid-19 (DNU-297) que dispuso de forma inmediata el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO)[2]. Esta medida demandó la adopción de nuevas formas de trabajo en lo que respecta al quehacer cotidiano y la aceptación de un modo de (con)vivir y relacionarse. En lo que respecta al ámbito educativo, las clases presenciales se suspendieron a nivel nacional y se impulsó la continuidad pedagógica, en un contexto de experimentación pedagógica y didáctica, apostando a la “virtualización forzosa” (Dussel, 2021; Di Piero y Miño Chiappino, 2020).En ese marco, el trabajo de campo se realizó entre agosto y noviembre de 2021 e implicó varias reformulaciones, debidas al contexto epidemiológico, en relación con el planteo original de la investigación (Di Piero et al. 2022). Las entrevistas a los/las estudiantes de la ciudad de Tandil se realizaron de manera virtual a través de la plataforma Zoom. Entretanto, el trabajo de campo en la ciudad de La Plata y las entrevistas correspondientes se realizaron de manera presencial en las escuelas, en un momento educativo atravesado por la hibridez en las modalidades presencial-virtual y la implementación de las “burbujas” que implicaban que distintos grupos al interior de una misma división escolar alternaran semanalmente la asistencia para garantizar una menor cantidad de personas presentes simultáneamente en el aula y reducir, así, el riesgo de contagio (de modo tal que una semana asistía el grupo A y a la semana siguiente el grupo B). Referentes conceptuales: desigualdades en los niveles secundario y superior y pandemiaEste trabajo se inscribe en la confluencia de tres líneas de estudio del campo de la educación en Argentina: la tradición que aborda los procesos de desigualdad en el nivel secundario (Tesdesco, 2009, Southwell, 2011, Tiramonti, 2009; Braslavsky, 1985, Miranda, Otero y Corica,), los estudios sobre universidad y educación superior (Suasnabar y Rovelli, 2015, García de Fanelli, 2014; Araujo, 2009; Bracchi y Marano, 2010; Ezcurra, 2011; Carli, 2012; Gluz, 2011; Tedesco, 1981 y 2014; Cambours de Donini y Gorostiaga, 2016; Marano, 2017; Marano, Molinari, y Vazelle, 2017, Pierella, 2019; Santos Sharpe, 2019; Dallaglio, 2018, Muñiz Terra), y una línea más reciente que indaga la situación de la educación durante la pandemia (Nuñez, Santos Sharpe y Dallaglio, 2022). Por razones de espacio, no ahondaremos en este trabajo en los aportes de cada una de las líneas mencionadas, sino que los integraremos en las reflexiones.Principales hallazgosA partir del trabajo de campo realizado es posible afirmar que tanto las expectativas a futuro en relación con las trayectorias posibles, como también las estrategias institucionales al momento del egreso del nivel secundario variaron sustancialmente de una escuela a la otra y fueron reconfiguradas en un contexto atravesado por la pandemia y signado por procesos de desigualdad educativa de largo alcance.1)Expectativas generalizadas, reconfiguradas y desigualesPor un lado, el trabajo mostró que las expectativas sobre continuar los estudios en el nivel superior son generales, es decir que todos/a los/as estudiantes entrevistados/as manifestaron intención de continuar estudiando. Al mismo tiempo, observamos que las expectativas fueron reconfiguradas a partir de la pandemia. Esas reconfiguraciones giraron en torno a tres cuestiones: lo vocacional (adquirieron mayor peso, por ejemplo, las opciones por carreras vinculadas a la salud); la limitación de experiencias internacionales (aspecto que sólo aparece en las escuelas privadas); y a la sensación de incertidumbre y desorientación debido a que en el marco de la pandemia habían perdido oportunidades mediadas institucionalmente de acceso a información en relación con qué hacer al año siguiente (muestras de carreras, exposiciones, charlas).1.1)Variaciones interinstitucionales en las expectativas y desigualdadEn el plano de la comparación interinstitucional, encontramos que lxs estudiantes de último año de secundaria entrevistados/as presentan una mayor precisión en la opción de carrera, facultad y/o universidad en el caso de las escuelas privadas en comparación con las estatales. Sin embargo, el clivaje sector estatal- privado no debe conducir a un reduccionismo ligado a concebir el sector de gestión como el atributo determinante, sino que las condiciones socioeconómicas de estudiantes, distribuidos en escuelas socioeconómicamente homogéneas hacia su interior en un contexto de segmentación educativa, actúan como atributo central a la hora de entender sus expectativas posescolares. Asimismo, es central el peso del trabajo y las estrategias de articulación que se impulsan a nivel institucional.1.2) Circuitos en la articulación internivelCon respecto a las menciones a la educación superior de gestión privada, aparecen exclusivamente en las escuelas privadas, mientras que las menciones al nivel superior no universitario (terciarios) hacen lo propio únicamente en las escuelas públicas. Es decir que se conforman dos tipos de circuitos en el momento de articulación entre nivel secundario y superior: o bien nivel secundario privado-nivel superior privado/estatal (universitaria) o bien nivel secundario estatal- nivel superior estatal (terciario o universitario). Entendemos que este fenómeno se relaciona con la mayor representación en el egreso de los quintiles de menores ingresos en la educación superior no universitaria (terciaria) en comparación con los quintiles más altos (Suasnabar y Rovelli, 2016). 2) Políticas institucionales de articulación y desigualdad A partir de la comparación institucional, cada establecimiento -de acuerdo a sus particularidades y considerando la heterogeneidad que caracteriza al sistema- otorga un sentido diferente a la problemática, y, en consecuencia, desarrolla prácticas y estrategias disímiles. Como indica Briscioli (2018), la dimensión institucional es central en tanto las condiciones de escolarización inciden en los recorridos escolares y el pasaje por distintas instituciones educativas podría facilitar u obstaculizar la progresión por la escolaridad. De ese modo, así como indicamos que la LEN corona un proceso que implicó el aumento de la matrícula acompañado por un crecimiento heterogéneo que lleva a la diversificación y conformación de comunidades fragmentadas, esas diferencias permean sobre las propuestas pedagógicas, los modos de regular el comportamiento, la existencia de espacios de participación estudiantil y también, como vimos, respecto del grado de articulación con el nivel siguiente. En ese sentido, la apropiación de las políticas e iniciativas de articulación muchas veces recae sobre la voluntad de un/a docente o directivo que los/las llevan a exposiciones/ muestras (cuya valoración es siempre positiva entre quienes llegan a participar), o difunden distintas iniciativas. De ese modo, aquello que desde la escuela se haga o deje de hacer es clave en tanto las instituciones ejercen roles diferenciales sobre la configuración de expectativas estudiantiles: encontramos escuelas que promueven la continuidad y escuelas que dejan la elección librada a los recursos individuales extraescolares de cada estudiante. Quienes asisten a las primeras son justamente quienes cuentan con más recursos extraescolares y experiencias en el nivel superior acumuladas en su entorno familiar o social general (familiares con experiencia universitaria que los/las asesoran, como la abuela o un amigo). Palabras de cierreA modo de conclusión, observamos que en el contexto abierto por la pandemia tanto la clase social de origen como las prácticas de las instituciones educativas incidieron profundizando procesos de acumulación de ventajas y desventajas (Saraví, 2015) respecto de los caminos a seguir tras el egreso del nivel secundario. Las expectativas estudiantiles varían de una escuela a otra y delinean dos circuitos: estatal- estatal/ privado- privado o estatal. Asimismo únicamente lxs estudiantes de escuelas estatales mencionan el nivel terciario como posibilidad. Por último, se percibe una importante variación sobre el trabajo que se realiza por parte de cada escuela, lo cual también incide sobre el grado en que las instituciones permiten abrir horizontes diferentes a los del sector de origen.