CIENCIA Y ARTE
Un lenguaje común entre física y arte contemporáneo
En Rosario, la muestra Gedankenexperiment [experimento mental] propone un ensayo sobre la Colección del Museo Castagnino+macro desde la mirada de la mecánica cuántica.
El viernes 18 se inauguró Gedankenexperiment [experimento mental] una muestra que une ciencia y arte. En esta entrevista, Carlos Stia, investigador adjunto del CONICET en el Instituto de Física Rosario (IFIR, CONICET–UNR), y Leandro Comba del Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (MACRO) describen el encuentro de estos dos mundos.
¿Qué significa Gedankenexperiment?
CS: Es una palabra alemana que significa experimento mental o experimento pensado y es un término que se utiliza no solamente en física, sino también en otras disciplinas. Estos recursos se usan para poner de manifiesto una teoría o incluso refutarla. En la física, a principios del siglo XX desde el surgimiento de la mecánica cuántica hasta su formulación definitiva, los experimentos pensados tuvieron un rol muy importante de la mano de Einstein, Schrödinger y Feynman, entre otros, ya que ante la imposibilidad de hacer determinados experimentos se recurría a la imaginación.
LC: Trasladado al arte y agregando una acepción, esta idea de experimento mental se trabajó pensado como un escenario donde producir un experimento, un ensayo interdisciplinar.
¿Cómo surgió la idea de hacer esta muestra?
LC: El motor fundamental es la colección Castagnino+macro, una de las más importantes del país. Desde el equipo curatorial siempre estamos pensando cómo presentarla desde alguna perspectiva nueva y en ese sentido lo interdisciplinar es un buen punto para trabajar. La ciencia estaba siempre ahí, me interesaba mucho qué podía pasar si juntábamos dos cosas a veces tan disímiles para ver si la colección respondía a esa propuesta. Le planteé a Carlos empezar a dialogar e intentar pensar en la idea de una muestra.
¿Cómo fue el proceso de armarla?
CS: Fue una experiencia muy enriquecedora. En las primeras reuniones charlamos e intercambiamos materiales cada uno desde su especificidad, tratando de encontrar ejes temáticos que sirvieran de inspiración. Todo ese proceso fue decantando en un lenguaje común. Creo que el desafío del trabajo interdisciplinario consiste fundamentalmente en encontrar ese lenguaje entre actores de diferentes áreas para poder llevar a cabo una labor y eso se refleja en el resultado en las salas.
¿Cuáles son las similitudes entre física y arte contemporáneo?
LC: Hay un potencial que comparte tanto la física como el arte contemporáneo que es la manera de transformar la forma de percibir y ver el mundo. Ambos plantean un cierto corrimiento de algunos límites; la pasión por la experimentación y la invención; y la búsqueda permanente. Cuando charlábamos había tópicos que compartíamos llegando a un punto de abstracción cercano a lo ontológico y lo filosófico.
CS: En ese encuentro la mecánica cuántica es un campo fértil que se puede usar como recurso para explorar esas similitudes. La mecánica cuántica es la rama de la física que estudia el comportamiento del mundo microscópico y en esa escala de lo pequeño, al nivel del átomo y de las partículas subatómicas, las cosas no se comportan de un modo familiar sino que de una manera anti-intuitiva y eso lleva a replantearse y redefinir algunos conceptos: realidad, identidad, el rol del observador-experimentador.
¿Cuál es el rol del espectador en la muestra?
LC: Hay una cierta fusión entre el observador en física y el espectador. Se pensó ese personaje entrando en la salas observando y decidiendo qué realidad puede armar, ver o cristalizar. Propusimos un recorrido a partir de ciertos ejes y planteando una muestra que más que dar un resultado se instale en el lugar del cuestionamiento.
CS: En mecánica cuántica uno plantea un experimento concreto una y otra vez y obtiene resultados diferentes. Ahí el observador modifica y forma parte esencial del sistema que está observando; esa idea es la que trasladamos a la muestra. Se pensó la percepción como un proceso donde la obra es un sistema y el observador ya no es pasivo, sino un experimentador. La percepción pasa a ser una experiencia que transforma y cada espectador devuelve una mirada diferente de esa realidad inasible.
¿Qué aportes mutuos les parece que se puede hacer entre ciencia y arte?
LC: Para el museo es muy nutritivo que se presente la colección de un lugar casi extremo. Siempre estamos buscando de qué forma se puede hacer una relectura de la colección y disfrutar de un nuevo recorrido.
CS: Sin duda, este trabajo interdisciplinario genera una percepción distinta y, en lo personal, estar contacto con artistas con sus múltiples visiones hace que, necesariamente, algo de esa creatividad pueda volcarse a mi trabajo cotidiano.
Sobre la muestra:
Gedankenexperiment [experimento mental] se desarrolla en el marco de un convenio de cooperación entre CONICET, la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad de Rosario y el Castagnino+Macro. También fue declarada de interés por la Facultad de Ciencias Exactas Ingeniería y Agrimensura de la Universidad Nacional de Rosario.
La muestra permanecerá exhibida entre el 18 de marzo y el 18 de mayo en el Macro (Oroño y el río). En este marco, se realizan cinco encuentros concebidos como ensayos: dos invitados —un artista y un físico— compartiendo un espacio en común, un encuentro que puede tomar la forma de una acción, una conversación, una entrevista o una intervención.
001 – Viernes 18 de marzo: Graciela Taquini, Andrea Fasani y Liliana Gómez.
Moderador: Pablo Romano.
Adhiriendo a “Rosario, ciudad con memoria” y actividades conmemorativas a los 40 años del golpe de Estado.
002 – Jueves 31 marzo: Roberto Echen y Omar Fojón.
003 – Jueves 14 de abril: Diego Bianchi y Bernardo Gómez.
004 – Jueves 28 de abril: Román Vitali y Roberto Rivarola.
005 – Jueves 12 de mayo: Jorge Horst y Ariel Dobry.
Todos los encuentros se realizarán en el piso 7 del Macro a las 18 h. La entrada es libre y gratuita. No requiere inscripción previa.
Por Vanesa Bomben. CCT Rosario.