IIGHI   05432
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES GEOHISTORICAS
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
El colectivo –pi y la concordancia aliterativa en toba desde la teoría de la replicación gramatical
Autor/es:
GONZÁLEZ, RAÚL Y MARISA CENSABELLA
Lugar:
México D.F,
Reunión:
Congreso; 53° Congreso Internacional de Americanistas; 2009
Institución organizadora:
Universidad Iberoamericana
Resumen:
Por lo general, el cambio inducido por contacto se manifiesta en la transferencia de material lingüístico desde una lengua a otra. Siguiendo a Heine y Kuteva (2005) se adoptarán los términos lengua modelo (M), la cual provee el modelo para la transferencia y lengua réplica (R), que hace uso del modelo. Se denominará al proceso involucrado en ello replicación gramatical.    De acuerdo con Carpio (2007:13), el sistema de número en toba (flia. Guaycurú) está compuesto por los valores singular y plural y, a su vez, existen otras dos categorías: distributivo y colectivo. Los alomorfos de plural en los nombres son: -Ö; -Öt; -Ö-; -Ö-...i; -qa; -o; -½e; -te. La selección de cada uno se encuentra determinada fonológica, morfológica y semánticamente. El sufijo -pi expresa la idea de muchas entidades cohesionadas, por ello, y dado que coocurre con los alomorfos de plural, Carpio (2007) lo considera un sufijo que expresa la idea de colectivo y no lo incluye dentro del sistema de número. Sintácticamente, el colectivo se comporta igual que el singular, aun cuando exprese la idea de pluralidad. En un trabajo anterior, Censabella (2002:162) observaba, sobre todo en el habla de los jóvenes tobas, una tendencia a utilizar el morfema -pi (colectivo) en detrimento de las unidades de plural para la concordancia verbo-nombre en la tercera persona: 1) a-so        qageta-pi     r-atawek-pi     fe-dal    oveja-col   3-escaparse-col    ‘Las ovejas (muchas) se escapan.’   en lugar de   2) a-so             qageta-l      r-ataweÖk     fe-dal          oveja-pl    3-escaparse.pl.    ‘Las ovejas (2 ó 3, pocas) se escapan.’   El tipo de concordancia en (1) es la que Corbett (2006:87) denomina ‘aliterativa’, es decir, cuando el elemento cuya forma es determinada en la concordancia (target) y el elemento que determina la concordancia (controller) utilizan la misma marca morfológica. Nuestro trabajo plantea que esta concordancia comienza a utilizarse de modo más extendido en la lengua pero sólo en cláusulas intransitivas, con verbos SA y SP y verbos agentivos de movimiento. El contacto con el español estaría suscitando este cambio; en esta lengua los morfemas de plural no poseen identidad de forma en la concordancia verbo-nombre, aunque sí la tienen en el sintagma nominal (la muñeca de la niña/ la-s  muñeca-s de la-s niña-s). La influencia del español se da en la transferencia del mecanismo de concordancia de número del sintagma nominal a la concordancia de número en la relación verbo-nombre en toba. Para ello se utiliza, mediante un mecanismo aliterativo, un morfema que no pertenece a la clase de número sino a otra afín, la de colectivo. Este mecanismo de concordancia no se observa en las cláusulas transitivas, ya que en este aspecto el español y el toba difieren. El español sólo exige en el verbo la concordancia de número entre el argumento S o A de la cláusula, sin indicar en el verbo la pluralidad de P. El toba, en cambio, posee varios morfemas (-te, -lo y -oÖ) que expresan la pluralidad del argumento P (Carpio 2004:94). Esta regularidad en el tratamiento del plural de los argumentos en función P impide la transferencia del mecanismo anteriormente mencionado a las cláusulas transitivas.