El estatuto actual de la fotografía etnográfica chaqueña. Entre la banalidad estética y el compromiso ético

ALEJANDRA REYERO

Resistencia

Encuentro; XXXII° Encuentro de Geohistoria Regional; 2012

Instituto de Investigaciones Geohistóricas (IIGHI) -CONICET

El trabajo analiza una serie de imágenes fotográficas obtenidas por Guadalupe Miles en 2001 en la región del Chaco salteño. A diferencia de un sinnúmero de imágenes hiperrealistas que –unilateral y arbitrariamente– se inscriben dentro del género documental con una carga de denuncia explícita, la producción de Miles abre grietas de sentido al proponer “imágenes bellas” que conducen inevitablemente al planteamiento y discusión de límites estéticos y prioridades éticas: ¿por qué fotografiar la vida de las comunidades indígenas en lugar de intervenir en ella con acciones específicas que atiendan las necesidades reales de los sujetos retratados y no a las inquietudes estéticas de la fotógrafa? Pero ¿cómo intervenir si antes no vemos?, ¿cómo efectuar sin ser afectados? Si admitimos que la belleza está íntimamente vinculada al contenido de la producción que aquí nos convoca, una primera lectura crítica advierte precisamente que las imágenes son bellas cuando “no es adecuado” que lo sean. Pero ¿cuál es el tratamiento fotográfico apropiado para abordar la realidad de las comunidades indígenas?, ¿no deviene el arte el espacio desde el cual proyectar una mirada lúcida y política sobre lo real? Estos y otros interrogantes formulados a lo largo del trabajo, actúan como argumentos disparadores para reflexionar sobre el estatuto actual de la fotografía de pueblos originarios chaqueños en el campo artístico contemporáneo.