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La población indígena reducida en pueblos de indios, desde los primeros tiempos de la colonia, fue motivo de controles específicos, aunque no siempre frecuentes, por parte de la corona. Dichos controles eran realizados por oficiales y funcionarios de prestigio, oidores de la Audiencia, gobernadores y enviados especiales, quienes con atribuciones concretas debían comprobar el estado de los habitantes de dichos pueblos, verificar el cumplimiento de la legislación vigente en las encomiendas e informar sobre el proceso en marcha de la evangelización, entre otras cuestiones. En la región de Corrientes, las inspecciones estuvieron presentes desde del siglo XVII con visitas desde la Audiencia de Charcas, esporádicas pero minuciosas en cuanto al proceso llevado a cabo. El siglo XVIII ofrece ya controles más asiduos, que han dejado una buena cantidad de visitas y registros que permiten seguir la evolución de la población y profundizar en algunas de las características sociales, económicas y culturales de la vida en estos pueblos. En este trabajo intentamos identificar las características poblacionales de los pueblos de indios que pertenecieron a la jurisdicción de Corrientes: Itatí, Santa Lucía de los Astos y Santiago Sánchez, a partir de la información que nos ofrecen las visitas del siglo XVIII. El primero, habitado por indios guaraníes, contrasta en diversos aspectos con los dos últimos habitados por grupos chaqueños. Estas diferencias claves, condicionaron el funcionamiento y las características de las reducciones que estaban bajo la tutela franciscana. De hecho, los pueblos habitados por chaqueños dejaron de existir en el primer tercio del siglo XVIII, a partir de los ataques permanentes de los indios no reducidos y otras causas relacionadas con el contexto.