Análisis de productos forticados con hierro: alimentos vehículos y factores alimentarios.

BANEGA, MARÍA DELFINA; IGUAL, CATALINA DANIELA; LENCINA, SABRINA

Gualeguaychú

Congreso; II Congreso de Bromatología y Nutrición -CByN-.; 2018

Facultad de Bromatología

La deficiencia de hierro es considerada una enfermedad prevalente que afecta aproximadamente al 20% de la población mundial. La mejor estrategia efectiva para prevenir la deficiencia de hierro ha sido la fortificación de alimentos, priorizando la cantidad de hierro adicionado. Sin embargo la funcionalidad del hierro depende en gran medida de los factores presente en alimento. El objetivo de este trabajo fue analizar el contenido de hierro y la presencia de promotores e inhibidores de la absorción en productos fortificados existentes en supermercados locales. Asimismo, se identificaron aquellos alimentos vehículos y los compuestos fortificantes más frecuentes. Se estudiaron 45 productos fortificados con hierro. De cada uno de ellos se analizó el tipo de alimento y su rótulo nutricional, del cual se observó el compuesto fortificante, contenido de hierro por porción, porcentaje que cubre de la ingesta diaria recomendada (IDR) y presencia de promotores e inhibidores de su absorción. Para los cálculos de porcentaje que cubre de la IDR de hierro de los productos analizados, se tomaron los siguientes valores, 14 mg de hierro para un adulto; 9 mg para lactantes de 7 a 11 meses; 6 mg para niños de 1 a 3 años; 6 mg para niños de 4 a 6 años y 9 mg para aquellos niños de 7 a 9 años. En aquellos alimentos destinados a la población en general se tuvo en cuenta las recomendaciones para un adulto. La carga y edición de datos se realizaron con la utilización de planillas electrónicas Excel ®. Los mismos fueron representados en gráficos y tablas de acuerdo a las categorías mencionadas anteriormente. De todos los alimentos analizados (N=45), el 31% (n=14) pertenecían a la categoría de lácteos y fórmulas infantiles; el 47% (n=21) a cereales y cereales infantiles, y por último, un 22% (n=10), correspondieron a la categoría de productos azucarados. En cuanto a los compuestos fortificantes más utilizados en lácteos y cereales fue el sulfato ferroso, encontrándose en el 64% (n=9) y 33% (n=7), respectivamente. En productos azucarados, con un 20% se halló el sulfato ferroso como así también el pirofosfato férrico, ambos en la misma proporción. El contenido de hierro observado en los rótulos nutricionales fue de 1 a 5 mg por porción. Los principales inhibidores que se encontraron en la totalidad de alimentos analizados, fueron calcio, caseína, fibra, ácido fitico y oxalatos. Dentro de los promotores, se hallaron las vitaminas A y C. La mayoría de los productos fortificados cubren la IDR, entre 20 a 50% de las recomendaciones diarias de hierro establecidas por el Código Alimentario Argentino (CAA). Luego de analizar los diferentes aspectos de los alimentos fortificados, se observó que en la categoría de cereales hay productos que, aun presentando inhibidores potenciales de la absorción del hierro, no tienen promotores para su absorción, lo que se podría suponer una baja biodisponibilidad del hierro en estos productos.