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En años recientes se ha detectado una miopatía emergente que causa pérdidas económicas importantes dentro de la industria avícola denominada pechuga de madera. Esta enfermedad afecta a los músculos pectorales de los pollos de engorde, los cuales adquieren una consistencia sumamente dura, fácil de identificar a la palpación. También se generan defectos de calidad visual y modificación en las características de la carne. Gran parte de la producción avícola de Argentina se centra en Entre ríos, si bien en la provincia no se ha reportado esta problemática en trabajos científicos, la miopatía existe y se evidencia por reclamos de clientes como así también por la inspección veterinaria de varias empresas. En base a lo expuesto, el objetivo del presente trabajo fue evaluar el grado de severidad para la miopatía pechuga de madera en pollos de engorde de una industria avícola de Entre Ríos y conocer la percepción de las características de los consumidores. Para ello se analizaron 623 pechugas, provenientes de aves de sexo mixto, con peso promedio de 2,941kg y 51 días de crianza extraídas del sector trozado. Se las clasifico en 4 categorías, utilizando el método de compresión empleando una pesa patrón de 200g siguiendo técnicas reportadas por diversos autores. Para evaluar la percepción de los consumidores se realizó una encuesta vía e-mail y/o redes sociales, consultando en el apartado a) si consume pollo b) frecuencia con la que consume pollo c) características que percibe cuando consume pechuga de pollo. Se calcularon las frecuencias de respuestas para el apartado a, b y c. En este último los datos se analizaron utilizando el programa Word Art y se creó una nube de palabras. Resultados: el grado de severidad encontrado para pechuga de madera en este estudio fué, grado 3: 6,42%; grado 2: 28,01% grado 1: 40,61% y grado 0: 24,88%. Con respecto a la encuesta, respondieron un total de 230 consumidores, el 98,7% estableció consumir pollo y al consultar la frecuencia la mayoría (56,1%) estableció que al menos dos o tres veces por semana. La nube de palabras obtenida para el apartado C se formó con un total de 605 palabras. Los consumidores seleccionaron asociaciones positivas y negativas acerca de las pechugas de pollo. Las palabras que emplearon como asociaciones negativas nombradas por el mayor porcentaje de los participantes fueron: seca (55,5%), compacta (24,0%), insípida (21,4), fibrosa (19,2%), deshilachada (16,6%), gomosa (11,8%) y dura (8,9%). Entre las asociaciones positivas se destacaron: tierna (50,0%) y sabrosa (27,5%). En conclusión, los datos obtenidos muestran valores de severidad similares a otros trabajos publicados mundialmente, si bien el porcentaje más bajo se obtuvo para pechugas con grado 3, éstas se perciben entre los consumidores como secas, compactas y duras además de representar pérdidas económicas importantes en las industrias avícolas.

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