BECAS
PARELLADA Cristian Abraham
congresos y reuniones científicas
Título:
Prolepsis y construcción del territorio nacional a través de los mapas escolares
Autor/es:
PARELLADA, CRISTIAN; BARREIRO, ALCIA
Lugar:
Salvador de Bahia
Reunión:
Conferencia; V International Conference on Cultural Psychology; 2020
Institución organizadora:
Conselho Nacional de Desenvolvimento Científico e Tecnológico
Resumen:
El presente trabajo tiene por objetivo presentar, desde el marco de la psicología cultural, una articulación entre los conceptos de border y prolepsis, con el fin de profundizar en el estudio de los procesos de producción y consumo de las representaciones cartográficas del territorio nacional. En los últimos años, el concepto de border ha comenzado a ser objeto de reflexión en diversos trabajos propios del campo de la psicología. Específicamente, en el campo de lapsicología cultural, por un lado, se reflexionó sobre las fronteras (borders) cómo un concepto que permite comprender las actividades de las personas y, por otra parte, se estudió, la relación entre master narratives y mapas históricos en el espacio escolar. En ambas líneas de investigación, se considera que tanto los límites como los espacios de frontera son construcciones sociales que adquieren su significación en el interjuego social de un mundo dividido territorialmente.Por otra parte, el término prolepsis refiere a la representación de un acto futuro como si estuviera existiendo en el presente. Dicho concepto ha sido empleado por Cole (1996) para explicar el desarrollo ontogenético del ser humano. Este autor afirma que las representaciones que los padres tienen sobre el futuro de sus hijos actúan como restricciones culturales que canalizan el desarrollo del infante, guiándolo desde el presente hacia el futuro imaginado. Este planteo coincide con el supuesto de la psicología cultural según el cual humanos son considerados seres que mediatizan la forma de relacionarse y actuar en el mundo, orientándose hacia el futuro mediante el empleo de instrumentos semióticos.En el caso de la Argentina, los mapas históricos que circulan en el ámbito escolar y se reproducen en los libros de texto son instrumentos culturales regulados por el Estado Nacional. Un ejemplo de ello es la Ley 22963 de la Carta, en la cual se impide la reproducción, por cualquier medio, de toda representación cartográfica que no se ajuste al mapa oficial elaborado por el Instituto Geográfico Nacional. El mapa oficial actual de la República Argentina incluye, además de la porción del sector continental sobre la que el estado ejerce soberanía efectiva, como territorios pertenecientes a este país a las Islas del Atlántico Sur, incluidas las Islas Malvinas, y a una porción de la Antártida. Estos últimos no son territorios sobre los cuales la Argentina ejerce soberanía, más bien forman parte de un futuro territorial anhelado por el gruponacional. Futuro que da forma no sólo al presente cartográfico sino también a la reconstrucción narrativa del pasado. Puede observarse de esta manera el interjuego entre los tres tiempos: pasado, presente y futuro. El futuro anhelado, mediante el cual se reconstruye el pasado, a la vez que se lo utiliza para explicar la situación territorial actual y justificar las acciones de los individuos. El futuro imaginado recae sobre un territorio esencializado. La esencialización del territorio promueve ciertas representaciones que sirven para justificar las acciones presentes y futuras de los individuos, a partir de un pasado que actúa como garante de que esas tierras siempre pertenecieron a la Argentina. En otras palabras, dicha esencialización puede permitir justificar en el presente los reclamos ante una usurpación de tales tierras y la aceptación de la creencia de que dicha ocupación es ilegítima. De esta manera, puede observarse que el futuro se presenta como una consecuencia teleológica del pasado, cuando en verdad el primero fue traído al presente y actúa como garante de una forma particular de reconstruir al segundo.Finalmente, esta reflexión puede resultar útil para repensar no solo nuestras representaciones sobre el mundo sino también sobre la identidad nacional. Principalmente, en un contexto social y político en el cual los nacionalismos vuelven a la escena y proponen considerar a las identidades nacionales y las fronteras como entidades fijas y ahistóricas.