INVESTIGADORES
ROQUE MORENO Maria
artículos
Título:
DIAGNÓSTICO PRESINTOMÁTICO POR BIOLOGÍA MOLECULAR DE CANCER COLORRECTAL HEREDITARIO NO RELACIONADO CON POLIPOSIS (HNPCC)
Autor/es:
MARÍA ROQUÉ; EDUARDO PUSIOL; HECTOR PERINETTI; LUIS MAYORGA
Revista:
ACTA GASTROENTEROLOGICA LATINOAMERICANA.
Editorial:
SOCIEDAD ARGENTINA DE GASTROENTEROLOGÍA
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 1999 p. 341 - 344
ISSN:
0300-9033
Resumen:
Entre el 5 y el 13 % de los CRC son hereditarios de los cuales el cáncer colorrectal hereditario no relacionado con poliposis o HNPCC es el más común. La diferencia de este síndrome con respecto al FAP (Poliposis Adenomatosa Familiar), es que en este último cientos de pólipos adenomatosos se desarrollan en el colon y recto entre los 10 y 20 años de edad, mientras que en HNPCC la cantidad de pólipos es inferior a 10, y la edad de manifestación es mayor.Un grupo especial de genes supresores lo constituyen por lo menos cuatro genes que conforman los genes MMR (genes reparadores de copias del DNA) relacionados con HNPCC y denominados hMLH1, hMSH2, hPMS1 y hPMS2. La mayoría de las mutaciones se han detectado en hMSH2 y hMLH1. El gen hMSH2 se encuentra en el brazo corto del cromosoma 2, (2p16) y tiene una extensión de aproximadamente 73 kb de ADN genómico. Para hacer el diagnóstico presintomático de toda la familia, se desarrolló en nuestro laboratorio una estrategia por PCR. Así obtuvimos un patrón característico de bandas que permitió distinguir entre homocigotas sanos y heterocigotas. Estos últimos, con un alelo sano y uno mutado, presentarán una muy alta probabilidad de desarrollar cáncer de colon. Este tipo de diagnóstico es aplicable para cualquier familia con HNPCC a la cual se le haya identificado la mutación que posee y de este modo se puede brindar información presintomática a todo pariente de la familia A los individuos sin mutación se les puede asegurar que tanto ellos como su descendencia no desarrollarán el tumor. Los pacientes con la mutación presente deben realizarse una colonoscopía cada 1-3 años, comenzando entre los 20-25 años y hasta los 60-75 años. Con el descubrimiento de los genes MMR en 1993-1994, y el inmediato desarrollo de técnicas de diagnóstico a partir de ADN, en la actualidad se puede lograr una identificación de los individuos afectados mucho antes de las manifestaciones clínicas, posibilitando un seguimiento y tratamiento muy precoz y ampliando así las posibilidades de éxito terapéutico. No obstante, se debe enfatizar que la información genética debe ser siempre reservada, no sólo para evitar posibles futuras discriminaciones, sino también para respetar la intimidad de cada familia.