Respuesta térmica de la zona costera macromareal al flujo de calor superficial en el golfo Nuevo (Chubut, Argentina)

RIVAS, A. L.; PISONI, J. P.; DELLATORRE, F. G.; SORIA, G

Ushuaia

Jornada; IX Jornadas Nacionales de Ciencias del Mar y XVII Coloquio de Oceanografía : Ciencia y Sociedad: Integrando saberes en los estudios del mar; 2015

CADIC - UNTdF

Se instalaron 10 data-logger que registraron la temperatura del mar cada 10 minutos, en cuatro fondeos ubicados a 50, 500, 1600 y 2600 metros de la línea de marea baja, en sitios con profundidades mínimas de 1, 12, 27 y 36 metros respectivamente. Se midió la temperatura en superficie y fondo (y en un caso a diferentes alturas intermedias) y simultáneamente se registró temperatura, humedad, presión, dirección y velocidad del viento en una estación meteorológica ubicada a ~3 km de los fondeos. El objetivo fue analizar la variabilidad de la temperatura en la columna de agua en relación con las forzantes ambientales (viento, marea y flujo superficial de calor), como indicadora de patrones de circulación normal a la costa. En la costa la inercia térmica disminuye por la disminución de la profundidad y en la escala estacional los flujos horizontales deben compensar el flujo atmosférico de calor para evitar que la amplitud térmica crezca desmesuradamente. En la escala diaria, la advección horizontal asociada a la marea creciente amortigua el flujo atmosférico mientras que la marea bajante tiende a acentuar su influencia, en aguas someras. Esto genera variaciones diurnas y semidiurnas de la temperatura que son básicamente reguladas por la marea baja. En posiciones muy costeras (3 m de profundidad media) y con mareas importantes (amplitudes de ~4 m), la profundidad efectiva puede cambiar significativamente en intervalos cortos de tiempo. Esto ocasiona variaciones de la temperatura en sentido contrario a lo que indica el flujo neto de calor (flujo atmosférico y advección horizontal). En los fondeos más alejados de la costa (500 a 2600 m) las fluctuaciones térmicas se asocian principalmente al efecto del viento y la marea y sugieren mecanismos de circulación cross-shore. Estos mecanismos podrían modular la temperatura de la zona costera en la escala estacional.