El millonario sin hogar, el analfabeto con un elevado estatus y la siempre vigente influencia de los estereotipos y creencias en el curso de la ciencia

VIGLIECCA NS.; BÁEZ S.

Congreso; I Congreso Internacional de Psicología "Ciencia y Profesión"; 2014

EL MILLONARIO SIN HOGAR, EL ANALFABETO CON UN ELEVADO ESTATUS Y LA SIEMPRE VIGENTE INFLUENCIA DE LOS ESTEREOTIPOS Y CREENCIAS EN EL CURSO DE LA CIENCIA   Este no es un comentario sociopolítico. De hecho, es más un comentario matemático y de metodología de la ciencia. Cuando se les pide a los alumnos de psicología, o a cualquier grupo de personas no pertenecientes a las ciencias exactas, que con 15 indicadores empíricos hagan una clasificación de tres niveles socio económicos, casi con total seguridad van a formar solamente tres grupos que, en realidad son tres casos: el típico supermillonario, el típico representante de la clase media y el indiscutible pobre. Sólo tres casos del total de los 32.768 grupos posibles de formar. Es más, si se hace una prueba de confiabilidad mostrándoles 12 fotos de casos típicos, siendo tres de ellos: un linyera, un maestro, y un sujeto en una mansión atendido por muchos sirvientes, es muy probable que exista un 100% de coincidencia en la clasificación de esas 12 personas en los 3 niveles socioeconómicos. Si entre esos indicadores empíricos se encuentran los años de estudios, el nivel de ingresos, la cantidad de propiedades, etcétera, la realidad es que, si se hace una definición operacional correcta, todos los sujetos del mundo (no sólo los 12 elegidos intencionalmente) tienen que poder ser clasificados, incluyendo los casos atípicos del título de este trabajo. Aunque resulte difícil de creer, en la ciencia contemporánea todavía un grupo de ´expertos´ sigue decidiendo así (por lectura de escrituras y opiniones sagradas sobre casos típicos) las enfermedades neuropsiquiátricas y sus categorías. Compartir un sistema de creencias produce semejanzas en la forma de percibir. Finalmente, por ilusión colectiva, una creencia se convierte en realidad y el ´hereje´ es simbólicamente ´incinerado´ (en forma similar a como se hacía en la edad media). El consenso entre poderosos, sin demostración, atenta contra la razón, que debería ser la esencia de la ciencia. //NOTA: Este trabajo fue aceptado el 17/2/2014 para ser presentado como resumen. El análisis es relevante para las definiciones o clasificaciones conceptuales de casos clínicos típicos en neuropsiquiatría incluyendo, por ejemplo, a la AFASIA.//   THE HOMELESS MILLIONAIRE, THE ILLITERATE WITH A LOFTY STATUS AND THE EVER-PRESENT INFLUENCE OF STEREOTYPES AND BELIEFS IN THE COURSE OF SCIENCE    This is not a sociopolitical comment. Indeed, this is a comment about mathematic and scientific methodology. When psychology students or any group of persons outside the exact sciences are asked to do a classification of three socioeconomic levels using 15 empirical indicators, almost certainly they will form three groups, which in fact are three cases: the typical multimillionaire, the typical representative of the middle class and the undeniable poor. They are only three cases out of a total of 32.768 possible groups. Moreover, if a reliability test is carried out by showing 12 photos of typical cases, being three of them: a beggar, a teacher, and a subject in a mansion assisted by many servants, it is very likely that there is a 100% of coincidence in the classification of those 12 persons in the three socioeconomic levels. Considering years of formal education, income, amount of properties, etc, as indicators, if a correct operational definition is done all the subjects in the world (not only the 12 intentionally selected) must be classified, including the outliers described in the title of this commentary. Although it is difficult to believe, in the contemporary science a group of ´experts´ is still deciding in this way (by reading scriptures and sacred opinions about typical cases) the neuropsychiatric diseases and their categories. Sharing a system of believes produces similarities in the way of perceiving. Finally, by a collective illusion, a certain believe becomes reality, and the ´heretic´ is symbolically ´incinerated´ (in a similar way as in the Middle Ages). The consensus among powerful persons, without demonstrations, goes against reason, which should be the essence of science.   //NOTE: This work was accepted on 02/17/2014 to be presented as an abstract. The analysis is relevant for conceptual definitions/classifications of typical clinical cases in neuropsychiatry including, e.g., APHASIA//