INVESTIGADORES
JACINTO Claudia Gabriela
libros
Título:
Nuevas alianzas y estrategias en la formación para el trabajo de jóvenes desfavorecidos de América Latina
Autor/es:
CLAUDIA JACINTO (COORDINADORA)
Editorial:
UNESCO/IIEP
Referencias:
Año: 2002 p. 183
Resumen:
Durante los años noventa, se desarrollaron en América Latina muchos programas contra la pobreza y/o el desempleo que propiciaron y financiaron formación vocacional para jóvenes desempleados que habían abandonado tempranamente el sistema educativo. Paralelamente, experiencias de más larga data ampliaron y/o adecuaron sus estrategias para llegar a los jóvenes desfavorecidos. Este libro presenta cinco estudios de caso de experiencias significativas en este terreno realizados en el marco de la investigación del Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación ?Estrategias alternativas de educación para los grupos desfavorecidos?. El primer estudio presenta el programa de formación para el trabajo del Foro Juvenil de Uruguay, una ONG que desarrolla acciones con jóvenes desfavorecidos a través de convenios con diversos actores públicos y privados. El segundo estudio analiza las acciones de formación profesional desarrolladas por el Instituto Nacional de Aprendizaje de Costa Rica, dirigidas a jóvenes pobres y examina la experiencia de ?los talleres públicos? y de un programa ejecutado en convenio con ONG ligadas al Instituto de la Infancia. El tercer estudio aborda el caso del Polígono Industrial Don Bosco en el Salvador. Este programa ilustra la participación de la Iglesia Católica, en la formación de jóvenes desfavorecidos y combina educación técnica de nivel medio con práctica laboral dirigida al autoempleo o al sector informal, otorgando un fuerte peso a la formación personal y social de jóvenes en situaciones de alta vulnerabilidad (delincuentes, drogadictos rehabilitados, etc.). El cuarto caso es el de un programa gubernamental de formación profesional de jóvenes rurales en Chile ejecutado a través de entidades privadas con y sin fines de lucro, que ofrece a los jóvenes rurales capacitación, crédito y transferencia tecnológica para facilitarles la creación de microempresas. El quinto estudio se refiere al Servicio Civil Voluntario en el estado de Rio de Janeiro en Brasil, dirigido a jóvenes pobres de hasta 18 años que no han terminado la escolaridad primaria, que ofrece enseñanza básica, entrenamiento básico en informática, noción de gestión de pequeños negocios y formación ciudadana. Un artículo inicial realiza el análisis comparativo de las experiencias seleccionadas. Señala que ellas representan la participación de diferente tipo de instituciones relevantes en la formación profesional de jóvenes desfavorecidos: la Iglesia Católica; Instituciones Nacionales de Formación Profesional; ONG?s; y los Ministerios de Empleo y/o Trabajo. Los programas muestran una renovación de los enfoques tradicionales de la formación profesional, sea por las alianzas interinstitucionales que implican, sea por las estrategias pedagógicas o de inserción laboral que desarrollan La comparación señala que se han ampliado las modalidades de asociación y articulación entre distintos tipos de actores públicos y privados que participan en los programas de formación dirigidos a jóvenes desfavorecidos. En el plano de las relaciones verticales entre el Estado y las entidades de formación es evidente un cambio en las formas de prestación de servicios públicos, más allá de continuar subsidiando centros de formación profesional previamente existentes, registrando una tendencia a subcontratar la ejecución de los cursos. En el plano horizontal, se observan nuevos arreglos tanto territoriales como sectoriales. Las articulaciones comprenden la construcción de redes o asociaciones o simplemente acuerdos informales dirigidos a una variedad de acciones: la complementación de distintos tipos de recursos; la formación conjunta de recursos humanos; y también coordinación de estrategias de interlocución frente a otros actores, en especial respecto a los organismos estatales y las empresas. El análisis comparativo también pone en evidencia que las estrategias de formación suelen ir más allá de los cursos de formación profesional específica. Por un lado, reconociendo las desigualdades sociales educativas que padecen estos jóvenes y, por otro lado, teniendo en cuenta las nuevas demandas de competencias en el trabajo, suelen incluirse componentes diversos que plantean una formación más amplia, especialmente módulos de reforzamiento de competencias básicas y de desarrollo de competencias socio-profesionales. Todas las experiencias reconocen que la formación profesional debe incluir la consolidación de ciertas competencias básicas (de lengua, matemáticas, de pensamiento) y sociales asociadas al desempeño de la ocupación. Todos los programas se plantean objetivos de inserción laboral, o al menos de mejoramiento de la situación de los jóvenes desfavorecidos dentro del mercado de empleo. Con estos objetivos conviven otros que apuntan a la integración social de estos jóvenes ante la preocupación por la falta de espacios institucionales para ellos, los niveles de violencia y marginación social a la que están sometidos. La escasez de estudios de seguimiento sólo permite conocer algunos indicios de los resultados de los programas, pero más allá de la inserción laboral de los egresados, las experiencias parecen cumplir funciones marginales o latentes importantes: motivar para el retorno de la educación formal y brindar un espacio de protección para los jóvenes, frente a un contexto social profundamente desintegrado. Por último, una de las debilidades detectadas por los estudios es la dificultad de diseñar e implementar los programas de capacitación de forma integrada con otros programas sociales