Recepción del marxismo en América Latina. La interpretación de Franz Hinkelammert sobre Marx y El Capital

FERNANDEZ NADAL, ESTELA M

Mendoza

Jornada; Terceras Jornadas de Sociología. Ofensiva neoliberal en toda la piel de América. El Estado en el centro del debate sociológico.; 2017

Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Universidad Nacional de Cuyo

Terceras Jornadas de Sociología de la FCPyS, UNCuyoPre-ALAS, Mendoza, Argentina: Ofensiva neoliberal en ?Toda la piel de América?. El Estado en el centro del debate sociológico15 y 16 de junio de 2017MESA Nº 19: A 150 años de la 1º edición de El Capital: reflexión, debate y actualidad de la obra. Ponencia: Recepción del marxismo en América Latina. La interpretación de Franz Hinkelammert sobre Marx y El Capital. Resumen:El filósofo y economista Franz Hinkelammert (1931) interpreta la obra fundamental de Marx en una línea de total continuidad con su pensamiento anterior y como culminación del mismo. Dentro del itinerario teórico-crítico que lleva a Marx hasta la escritura del tomo 1 de El Capital, Hinkelammert destaca dos hallazgos importantes en sus obras tempranas: 1) en el ?Prologo? de su Tesis Doctoral (1841), se encuentra la sentencia de la filosofía contra los falsos dioses del cielo y de la tierra ?que no al ser humano consciente de sí mismo como divinidad suprema?; y 2) de esta afirmación, en su Introducción a la Crítica de la Filosofía del Derecho de Hegel (1844), Marx formula su imperativo categórico: de ?echar por tierra todas las relaciones en que el ser humano sea un ser humillado, sojuzgado, abandonado y despreciable?.La síntesis de ambas tesis constituye, a juicio de Hinkelammert, el paradigma del pensamiento crítico, que Marx aplica primero a la religión y luego a la economía política. Dicho paradigma se formula en estos términos: El pensamiento crítico parte de considerar al ser humano (en tanto ser vivo, natural, corporal y necesitado) como ?divinidad suprema?, y, en consecuencia, adopta el imperativo categórico de echar por tierra todas las relaciones en que el mismo no es tratado conforme a esa dignidad suya, esto es, donde imperan falsos dioses que lo humillan, sojuzgan, abandonan y desprecian. Frente a esa inversión, a esa irracionalidad, Marx formula el criterio de racionalidad que debe orientar la búsqueda de superación de la sociedad burguesa y la construcción de una sociedad ?humana? en el sentido de humanizada, esto es: ?una asociación en que el libre desarrollo de cada uno será la condición del libre desarrollo de todos?. La divinidad devuelta al ser humano es sinónimo de su libertad, y esta supone el reconocimiento de la autorrealización del individuo humano como necesario para la autorrealización de todos y cada uno. En el seno de la economía política, su crítica se encamina contra los fetiches de la mercancía, el dinero y el capital. En su obra cumbre reformula su imperativo categórico incluyendo a la naturaleza, cuerpo ampliado del ser humano, como dimensión que debe ser liberada del dominio de los dioses falsos terrestres e incorporada en el concepto del ser humano como ser supremo. El Capital culmina (según la hipótesis hinkelammertiana de que el capítulo XXIII podría ser el último del primer tomo) con una condena al asesinato del hermano, que advierte sobre el potencial destructivo de la sociedad capitalista y su custodio: el poder imperial mundial. Y pone la esperanza de una alternativa en la reacción del sujeto humano como sujeto viviente.