INCIHUSA   20883
INSTITUTO DE CIENCIAS HUMANAS, SOCIALES Y AMBIENTALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Contribuciones críticas de la teoría feminista a la igualdad de las mujeres.
Autor/es:
VELA LILIANA
Lugar:
Argentina
Reunión:
Congreso; II Congreso Internacional Extraordinario de Filosofía; 2007
Institución organizadora:
Universidad nacional de San Juan
Resumen:
Variaciones críticas de la teoría feminista frente a la igualdad de las mujeres. Los atascos del liberalismo político                   Entre los problemas que el liberalismo político plantea a la crítica feminista se encuentra el hecho de que no asumió las consecuencias que la nueva concepción política tendría en relación con la igualdad de las mujeres.   Según la crítica feminista, las razones de esta ausencia se vinculan con el hecho de que la preocupación inicial del liberalismo fue  la intervención autoritaria del gobierno sobre los individuos antes  que  las derivaciones que la igualdad de cada ser humano traería aparejada en la nueva organización social y política.              Una de las formas de organizar dichas críticas ha sido distinguir dos amplios campos: el feminismo individualista y el relacional. El primero está vinculado a la tradición liberal; el segundo se opone al capitalismo y al orden burgués. La perspectiva relacional no implica un conjunto homogéneo, por el contrario comprende a diversas posiciones ideológicas y hasta contrapuestas; no obstante,  se encuentran  ligadas por el análisis del funcionamiento sociopolítico de las nociones de igualdad y diferencia. Otro criterio de análisis divide las críticas entre:  marxistas y maternalistas. Las marxistas se ocupan de las bases capitalistas y patriarcales del estado liberal y la opresión en la división sexual del trabajo. Desde esta perspectiva, el estado no sólo no garantiza derechos iguales sino que tapa las discriminaciones efectivas; para las feministas marxistas la liberación de las mujeres depende de la desaparición del estado liberal. Avanzados los setenta, la corriente feminista maternalista propuso una reconsideración del valor de la familia y la maternidad para la conciencia feminista. Esta corriente se opone a la concepción de la ciudadanía individualista, fundada en derechos y contratos y a una imagen del ámbito público como espacio excluyente de  de participación política.  Por el contrario, defenderá la función materna que  se lleva a cabo en el ámbito privado pero haciendo de este ámbito un espacio de ciudadanía. Sin embargo, esta postura implica serios problemas tanto para el discurso político feminista como para la acción política democrática, en cuanto retrotrae a una posición unidimensional a las mujeres y mantiene la asignación de ellas al espacio privado.             Frente a la complejidad  y diversidad de problemáticas que la teoría feminista debe enfrentar hoy,  algunos sectores proponen agudizar el examen de la igualdad concebida como un  núcleo que  no ha sido agotado y desde el cual es posible  dar nueva carnadura a la democracia. Desde este ángulo la democracia liberal, aún con límites, podría reducir márgenes de desigualdad presentes en las sociedades contemporáneas.