INCIHUSA   20883
INSTITUTO DE CIENCIAS HUMANAS, SOCIALES Y AMBIENTALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Pensamientos descolonizadores desde América Latina: los vínculos entre colonización y relaciones de género desde las perspectivas de Francesca Gargallo y Silvia Rivera Cusicanqui
Autor/es:
MARTÍNEZ ESPÍNOLA, MARÍA VICTORIA
Lugar:
Neuquén
Reunión:
Jornada; VI Jornadas de Historia de la Patagonia ?Pasado y presente: encuentro de las Ciencias Humanas y Sociales con la Historia?; 2014
Institución organizadora:
Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional del Comahue
Resumen:
La presente ponencia intenta analizar y comprender los abordajes de dos pensadoras latinoamericanas acerca de los vínculos que permiten entender de manera profunda las relaciones entre sistemas coloniales y patriarcales en algunos pueblos originarios de América Latina. Por un lado, analizamos algunos escritos de Francesca Gargallo, filósofa feminista italiana radicada en México, quien ha dedicado numerosos libros y artículos a la construcción de una historia de las ideas feministas nuestroamericanas. Por otro lado, se aborda la lectura y análisis de libros y artículos de Silvia Rivera Cusicanqui, socióloga boliviana que rescata el pensamiento aymara, quien a partir de sus estudios históricos sobre Bolivia revela el entramado de relaciones entre los procesos de colonización y patriarcalización y sus consecuencias para la vida de las mujeres. De manera específica pretendemos con este análisis, por un lado, identificar algunas de las críticas que plantean los feminismos de mujeres indígenas respecto de algunos conceptos y supuestos propios del feminismo académico desde la perspectiva de Francesca Gargallo, así como seguir las pistas de las especificidades del pensamiento de mujeres indígenas según la investigación antropológica de la autora; por otro, intentaremos comprender los nexos históricos entre la opresión colonial y la opresión patriarcal, según el análisis de Silvia Rivera Cusicanqui. Francesca Gargallo se autodenomina feminista autónoma. Desde esta perspectiva, una de las preguntas que recorren sus escritos es sobre la existencia de feminismos más allá de las tradiciones occidentales, en el contexto latinoamericano, o más precisamente de Abya Yala. La autora lleva a cabo una crítica al interior de las teorías feministas con la finalidad de ?ubicar en una historia plural de las ideas feministas nuestroamericanas los aportes de mujeres que interpretan la realidad a partir de los conocimientos producidos por su cultura y en diálogo intercultural con otras, en un esfuerzo por cumplir con la función liberadora, emancipadora y crítica del quehacer filosófico? (Gargallo, 2011). En uno de sus numerosos artículos, Gargallo parte de la problemática de que existe una dificultad para el sistema académico, que es la de aceptar y definir a los pensamientos y acciones de las mujeres organizadas desde una perspectiva cultural diferente a la del capitalismo de cuño cristiano y del parentesco de familia nuclear, en particular de las mujeres de diversos pueblos originarios de América. Así, encuentra que en las etnografías tradicionales las mujeres de los pueblos originarios han sido representadas como las reproductoras pasivas de su cultura, o como las víctimas de la tradición patriarcal (Gargallo, 2008). En este trabajo, Gargallo aborda la distinción entre un ?feminismo hegemónico? y el ?feminismo de mujeres indígenas?, explicando algunas de sus diferencias sustanciales. El feminismo hegemónico se caracteriza por ser un ?feminismo de «agenda», es decir, de planificación y contención de demandas específicas en ámbitos establecidos por agencias y organismos nacionales e internacionales, muy poco abierto al ejercicio autoreflexivo de la subjetividad de las mujeres de los pueblos originarios, casi intolerante ante su necesidad de reunirse y desahogar las dudas sobre su papel comunitario en relación con las costumbres que las violentan? (Gargallo, 2008). Por su lado, el ?feminismo de mujeres indígenas? es definido como ?la acción de las mujeres que se encuentran entre sí voluntariamente para dialogar sobre su condición y la eventual mejora de la misma (definición que considero propia de cualquier feminismo) si éstas lo hacen desde una idea de conciencia comunitaria, al interior de una estructura política que considera el sistema sexual binario como eje ordenador de una cosmovisión ordenadora? (Gargallo, 2008, cursivas en el original). Respecto del abordaje etnohistórico de Silvia Rivera Cusicanqui en torno de los cambios en los sistemas de género en sociedades andinas, nos interesa revisar los principales hitos históricos que, según el estudio de la autora, marcaron puntos de inflexión en los patrones de relaciones entre géneros en el contexto andino de Bolivia. Si bien la trayectoria intelectual de Rivera Cusicanqui es diversa en cuanto a los enfoques que han predominado en su obra en distintas etapas de su pensamiento, sus estudios sobre relaciones de género han ocupado buena parte de su obra. Fue hacia fines de los años ?90 que la preocupación por el mundo femenino y la incursión en asuntos de género la llevó a reflexionar sobre el paralelismo entre los modos de opresión que viven las mujeres y los que pesan sobre las poblaciones indígenas, dando como resultado el trabajo sobre ?La noción de «derecho» o las paradojas de la modernidad postcolonial: indígenas y mujeres en Bolivia?. Desde esta nueva apertura, va a cuestionar las formas masculinas y estado-céntricas de organización popular, sindicatos, organizaciones étnicas y asociaciones urbanas: ?En 1993, los rasgos masculinizantes del modelo político implantado en 1952 habían sido al menos señalados, al develar a la noción de ?ciudadanía? impartida por el Estado, como un constructo cultural en el que se combinaba una imagen centrada en el varón adulto, mestizo, aculturado y propietario privado, como epítome del nuevo ciudadano creado con la revolución? (Rivera Cusicanqui, 2010: 133). Es respecto de su abordaje sobre la noción de mestizaje y la construcción de identidades históricas que la perspectiva de género cobró relevancia en su obra, permitiéndole reconocer críticamente nuevas dimensiones respecto de sus trabajos anteriores: ?La adopción de una lectura de género me ha permitido descubrir que la Nación Mestiza propugnada por los movimientistas ?de igual modo que la Nación Aymara o Qhichwa, etc., propugnada por las corrientes indianista/katarista? pueden también convertirse en nuevas versiones monológicas y falogocéntricas del Sujeto Único, construcción occidental y colonial por excelencia, que seguramente bloqueará por mucho tiempo aún el diálogo intercultural en Bolivia? (Rivera Cusicanqui, 2010: 132). En un primer momento de su abordaje, Rivera Cusicanqui afirma, respecto de las relaciones entre géneros en la sociedad andina pre-hispánica, una distancia en relación a cierto idealismo que pudieran abrigar algunas corrientes del feminismo en torno a la igualdad y equilibrio de género en las sociedades indígenas. Pretende, en cambio, mostrar cuáles fueron los marcos estructurales en los que se desenvolvió el inestable equilibrio de estas relaciones, entendido como ?una auténtica apuesta femenina en/por el poder, pero también un ejercicio permanente de transformación y subversión del poder? (Rivera Cusicanqui, 2010: 180). Consideramos que el intento de profundizar en el pensamiento de las autoras y poner en diálogo ambos análisis es posible dado que ambas escriben desde el contexto socio-cultural actual, sus obras abarcan varios temas en común, y sus propuestas descolonizadoras comparten un horizonte de emancipación común, en el que la revalorización de las culturas originarias de América es la clave de posibles procesos liberadores.