INCIHUSA   20883
INSTITUTO DE CIENCIAS HUMANAS, SOCIALES Y AMBIENTALES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
El paisaje del vino como patrimonio cultural de la región: evaluación y valoración. Mendoza Argentina.
Autor/es:
SILVIA CIRVINI Y LORENA MANZINI
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Jornada; II Jornadas Interdisciplinarias de Investigaciones Regionales Enfoques para la Historia; 2011
Institución organizadora:
Grupo de Estudios Regionales Interdisciplinarios, Instituto de Ciencias Humanas, Sociales y Ambientales (INCIHUSA)- CONICET Mendoza
Resumen:
Este
trabajo expone una primera aproximación al tema del paisaje del vino,
desarrollado en el marco de un Proyecto sobre Rutas e Itinerarios
Culturales en el Área metropolitana de Mendoza. Nuestro primer objetivo
es la caracterización de este tipo particular de paisaje cultural y su
análisis desde el punto de vista patrimonial. En segundo lugar
pretendemos alcanzar una catalogación de los diferentes tipos de
paisajes del vino, elaborar un método para su evaluación a partir de la
selección de casos (unidades espacialmente situadas) y finalmente
fundamentar su valoración para promover: a) su activación como recurso y
b) su protección como patrimonio cultural, c) su ordenamiento y
gestión.
Esta
ponencia propone identificar y desarrollar una primera caracterización
y evaluación del paisaje del vino, desde su condición de
patrimonial, articulado con el conjunto de bienes que constituyen el
patrimonio vitivinícola en el Área Metropolitana de Mendoza. Se busca
evaluar su potencialidad como recurso, fundamentar su valoración como
paisaje cultural a partir de los usos nuevos adquiridos o antiguos que
se mantienen dentro del marco de un desarrollo local sostenible.[1]
Si
bien la vitivinicultura en la provincia de Mendoza Argentina data de
tiempos coloniales, son escasos los testimonios materiales de este
período en el presente, por haber quedado reducidos a marcas o huellas
en el territorio que sólo una decodificación especializada puede
transformar en mensaje. La casi totalidad de los edificios y sitios
patrimoniales de grandes y pequeños conjuntos que se conservan en la
actualidad pertenecen al período de la primera modernización de esta
agroindustria y a su crisis de expansión (1880-1950).
En
Mendoza, la vitivinicultura a escala industrial desarrollada a partir
de las últimas décadas del siglo XIX, reorganizó espacialmente el
territorio, como espacio productivo, social y simbólico. La explotación
intensiva del suelo agrícola - resultado del monocultivo de la vid -
determinó la multiplicación de pequeñas propiedades estructuradas sobre
un sistema de regadío de oasis. El patrimonio de la producción en el
caso de la vitivinicultura abarca un conjunto complejo y heterogéneo
de obras y bienes que se ubican tanto en el ámbito rural como el urbano
y que pertenecen tanto a la actividad agrícola como a la industrial y
de servicios.
Las
cíclicas crisis de la industria vitivinícola, agravadas en el último
tercio del siglo XX pusieron en riesgo de pérdida a un vasto conjunto
de bienes patrimoniales así como al deterioro y las mutaciones del
paisaje del vino en la región.
Sin
embargo la vitivinicultura en la región es una agroindustria que
atraviesa desde los años 90 del siglo XX una nueva modernización, no
sólo tecnológica y económica sino también cultural. Se han perdido
antiguas áreas cultivadas bajo la presión inmobiliaria de los barrios
privados y ha crecido el área cultivada en nuevas zonas vitivinícolas
(Valle de Uco). La reconversión vitivinícola ha transformado el paisaje,
aportando nuevos elementos y desdibujando otros. Este fenómeno está
generando un impacto cultural y ambiental, tanto en la sociedad como en
el territorio provincial que requiere de un análisis particular. En
toda acción de protección y ordenamiento del paisaje, es necesario
considerar que es lo que hay que mantener para enriquecer su valor
patrimonial preservando las relaciones que han hecho que este bien
tenga valor: es decir el paisaje cuenta una historia, es una narración
inserta dentro de la cultura, una construcción conjunta y cambiante que
si bien no puede dejar de transformarse debe también mantener su
espesor histórico.
La
labor de nuestro equipo está dirigida a ampliar la mirada de las
categorías de bienes arquitectónicos con la de paisaje, y los sistemas
patrimoniales. La labor realizada parte de considerar al paisaje como cualquier
parte del territorio, tal como es percibida por las poblaciones, cuyo
carácter resulta de la acción de factores naturales y/o humanos y de
sus interrelaciones (Convención Europea del Paisaje, 2000), al
mismo tiempo de concebirlo como un patrimonio en permanente
construcción y transformación. Articular paisaje y patrimonio cultural
posibilita una lectura integrada, enriquecida, tanto de los
bienes como del territorio que los contiene y significa, lo cual
esperamos potenciará su conversión como recurso cultural facilitarían y
potenciarían la interpretación, valoración y hasta su activación
turística.
[1]
Este trabajo se enmarca en los resultados del PICT 13-14022
(2005-2009) y en el desarrollo del PICT 0484 (2010-2013), dirigidos por
S. Cirvini en INCIHUSA Conicet y financiados por la ANPCYT.