INVESTIGADORES
SKLIAR Carlos Bernardo
capítulos de libros
Título:
La soledad de la escritura a través de lo femenino. Textos entre cárceles, hospicios, cartas y temblroes.
Autor/es:
CARLOS SKLIAR
Libro:
Género es más que una palabra. Educar sin etiquetas.
Editorial:
Miño y Dávila
Referencias:
Año: 2015; p. 115 - 128
Resumen:
Es una experiencia común inclusive para aquellos que lo ignoran o lo disimulan: la soledad encoge los hombros, o asfixia el alma, o recoge las cenizas de la existencia, o desata los deseos. La alternativa al encogimiento o el recogimiento no es interesante, sobre todo si se pronuncia la soledad con otras palabras que todo lo empeoran: agobio, pena, desánimo, ausencia, exilio, dolencia, suicidio. La educación, por lo general, sospecha de la soledad de los niños y de los jóvenes; quizá la literatura mejore la soledad o la soledad mejore la literatura, aunque ni una ni la otra son ciencias exactas, y mejorar no es una palabra que pueda pronunciarse sin una cierta duda.Lo cierto es que la experiencia literaria, escrita o leída, es una experiencia de soledad: lo confiesan sin secreto quienes se apartan por horas o décadas y preferirían no ser interrumpidos, quienes permanecen siglos detenidos entre fragmentos o textos abandonados a su propia suerte, quienes sin buscar específicamente nada recorren el laberinto o la travesía no exentos de peligro. Apartarse hacia la soledad, apartar la soledad: esta es otra forma de comprender los límites que dividen o fragmentan o distinguen la experiencia humana. En ese sentido la soledad podría ser un principio, un punto de partida, una patria, un refugio, una guarida, el propio cuerpo, algo parecido a una atmósfera, a una tonalidad, que será siempre irrepetible, imprevisible, indefinida.