Salvado de Soja: Potencial Biosorbente para la Remediación de Aguas Contaminadas con Cromo

BLANES P.S.; SALA L.F.; GARCÍA S.I.; GONZÁLEZ J.C.; FRASACAROLI M.I; BORDONI M.E.; FAILO P.; FANTINI N.; NANNINI J.; GULISANO M.; MEDEOT A.; RUBIN DE CELIS E.; PIEHL L.

Rosario

Congreso; Mercosoja 2011. Quinto Congreso de la Soja del Mercosur y primer Foro de la Soja Asia-Mercosur. Rosario, Argentina.; 2011

El uso de compuestos de cromo en industrias tales como curtiembres, electro-platinado, metalúrgica, electrónica, plaguicidas, etc. generan gran cantidad de residuos tóxicos provocando un daño para el medio ambiente y la salud humana. Según la Organización Mundial de la Salud (WHO, 2004) el nivel máximo de cromo total permitido para aguas de uso doméstico es de 0,05 mg/L, y si bien existen métodos convencionales para su remoción como intercambio iónico, adsorción sobre carbón activado, ósmosis inversa y filtración con membrana, estos métodos suelen ser costosos, requieren gran cantidad de otros compuestos químicos y pueden causar problemas adicionales por la disposición de los residuos (Bellú et al., 2010, Sala et al., 2010). Estos hechos motivaron el desarrollo de tecnologías alternativas de remoción de metales, incrementando el interés en procesos de biosorción. Biosorción es un término que describe la eliminación de metales pesados por la unión pasiva a biomasa no viva a partir de soluciones acuosas (Sala et al., 2010). Este método es económicamente viable porque emplea materiales naturales abundantes o residuos provenientes de procesos industriales, por lo que muchos sub-productos agrícolas, entre ellos la cascarilla de soja, han sido propuestos como sorbentes buenos y de bajo costo para la remoción de Cr(III) y Cr(VI) (Miretzki et al., 2010). En Argentina, uno de los cultivos de mayor importancia económica es la soja; su producción se destina mayoritariamente a la obtención de aceite y parte de la harina o expeller remanente del proceso de extracción, se emplea en alimentación humana por su alto contenido en fibras y proteínas, y es especialmente usado por pacientes diabéticos debido a su alto valor nutricional y su baja proporción de hidratos de carbono (Daneshvar et al., 2002). El salvado o cascarilla de las semillas de soja suele destinarse a suplementar raciones para el ganado vacuno, con buena eficiencia, comparable a la del maíz como fuente energética (Ipharraguerre et al., 2003). Posee un alto contenido de fibra (> 60% Fibra Detergente Neutro) la que resulta ser en su mayoría digestible (>80%) y esto determina que no sea apto como único alimento para rumiantes. Además de ser económico y abundante, el salvado de soja posee en su composición grupos -NH2 y -COOH los cuales tienen propiedades reductoras y adsorbentes para especies de cromo (Daneshvar et al., 2002). En la zona de influencia de Rosario (Santa Fe), prepondera este cultivo, lo cual convierte a la soja en un biomaterial ideal para ser utilizado en la eliminación de cromo de aguas residuales y de este modo se otorga valor agregado a esta fracción del grano de soja. Por lo antes expuesto, este trabajo propone investigar la capacidad de remoción de cromo de soluciones acuosas empleando como sorbente salvado de soja, determinar el mecanismo de sorción y plantear un sistema para la eliminación de cromo de efluentes industriales.