DECLORINACION DE POLICLORUROS DE BIFENILO EN ACEITES MINERALES. INFLUENCIA DE LA TEMPERATURA Y LA CONCENTRACÍON DE REACTIVOS

GABRIEL BEDOGNI; DANIEL ALBA; NORA OKULIK; CRISTINA PADRÓ

Tucuman, Argentina

Congreso; XXVII Congreso Argentino de Química; 2008

Asociación Química Argentina

Los bifenilos policlorados (PCBs) fueron ampliamente utilizados, algunos años atrás, tanto en aplicaciones industriales como civiles. Esto se debía a las siguientes ventajas: estabilidad térmica, resistencia a la oxidación, reducción y agentes químicos y sus excelentes propiedades dieléctricas. La elevada toxicidad de esta clase de compuestos se debe a su alta estabilidad frente a agentes químicos, lo que lo hace resistente a la degradación, tendiendo a bioacumularse en los organismos vivos[i],[ii]. También debe agregarse que los PCBs son precursores de otros dos tipos de compuestos aún más peligrosos que él mismo: las Dioxinas y Furanos. Estos son producidos a partir de PCBs en condiciones extremas de temperatura (400°-500°C). Por estos motivos fueron prohibidos primero en EEUU (1976), e inmediatamente después en la Unión Europea. En el presente, los PCBs son considerados unos de los contaminantes más peligrosos. El Policloruro de Bifenilo (PCB) está considerado según el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) como uno de los doce contaminantes más nocivos fabricados por el hombre. Actualmente su uso está prohibido en casi todo el mundo. En los últimos 20 años se realizaron varias investigaciones para la remoción y destrucción de PCBs en productos contaminados (principalmente aceites dieléctricos y suelos)[iii],[iv],[v],[vi] y se desarrollaron numerosos procesos[vii]. Los procesos pueden ser destructivos tanto para los PCBs como para el producto contaminado. Entre los procesos de descontaminación no destructivos a escala industrial, aquellos basados  en la reacción de los PCBs con un alcoxido de polietilen glicol (PEG), son por el momento los más viables. Esta tecnología fue aplicada inicialmente usando sodio metálico disperso en polietilenglicol, demostrando una rápida y completa descomposición de los PCBs, pero presentando un problema de operación. De hecho, el manejo de sodio metálico requiere precauciones especiales en la manipulación, por lo cual la sustitución de sodio metálico primero con hidróxido de sodio y luego con hidróxido de potasio condujo a un sistema más seguro, aún efectivo y tolerante al agua y otros contaminantes. Dado que el mecanismo global de reacción aún es desconocido[viii], el presente trabajo se enfoca inicialmente al estudio cinético de la reacción, con el objeto de hallar la temperatura y concentraciones de reactivos óptimas.