IMBICE   05372
INSTITUTO MULTIDISCIPLINARIO DE BIOLOGIA CELULAR
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Análisis del efecto cuello de botella en haplotipos del cromosoma Y mediante simulaciones
Autor/es:
MUZZIO, M; MUZZIO, JC; BRAVI, CM; BAILLIET, G
Lugar:
Bogotá, Colombia
Reunión:
Congreso; Congreso Latinoamericano de Antropología Biológica; 2010
Institución organizadora:
Asociación Latinoamericana de Antropología Biológica
Resumen:
ESTE TRABAJO CORRESPONDE AL CAMPO DISCIPLINAR DE LA ANTROPOLOGÍA FÍSICA (DISCIPLINA DESAGREGADA 5701-ANTROPOLOGÍA FÍSICA), QUE NO SE ENCUENTRA ENTRE LAS OPCIONES A ELEGIR EN EL SITIO DE "CAMPO DISCIPLINAR DE LA PUBLICACIÓN".Objetivo: evaluar bajo qué condiciones es detectable el fenómeno de cuello de botella en haplotipos del cromosoma Y, mediante simulaciones por computadora, que permiten modelos muy reducidos donde se ve explícitamente el efecto de alguna/s variables.Materiales y Métodos: los haplotipos del cromosoma Y se simularon con el código HSS disponible online (http://sites.google.com/site/haplosim/), modificado para simular cuellos de botella, pudiendo así realizar diferentes ensayos para analizar su efecto en la generación final. Una primer simulación sólo consistió de 70 individuos, en 450 generaciones, descendientes de una única combinación alélica, y fue tomado como grupo control. Luego se ensayaron 7 tratamientos donde se reducía el total a 35 sobrevivientes, recuperándose al máximo de 70 en la siguiente, en las generaciones 112, 225, 337, 365, 394, 422 y 430, y 7  tratamientos en las mismas generaciones donde los sobrevivientes eran 14, también volviendo a 70 en la generación siguiente al fenómeno.Se empleó el software Arlequin para estimar los valores FST y comparar estos grupos en su generación final, de a pares.Resultados: Sólo hubo diferencias significaticas (p<0.05) entre las simulaciones con 14 sobrevivientes, con cuellos de botella a partir de la generación 365, al compararse con todas las simulaciones con 35 sobrevivientes.  Esto reflejaría que, dadas las tasas mutacionales de los microsatélites del cromosoma Y, si los sobrevivientes alcanzan la mitad, es posible compensar el efecto en 20 generaciones; además, en los casos donde los sobrevivientes son un quinto del total, en menos de 113 generaciones (aproximadamente 2825 años) se compensaría la reducción de la diversidad ocasionada por el efecto simulado, pero ya con una antigüedad de 85 generaciones sería observable.