Eje hipotálamo-hipófiso-testicular: fisiología y bioquímica

MARÍA OLGA SUESCUN

Fisiopatología Endocrina: Bioquímica y Métodos Diagnósticos

Química Montpellier SA

Lugar: Buenos Aires; Año: 2007; p. 23 - 34

Eje Hipotálamo-hipófiso-testicular El testículo es un órgano par que cumple dos funciones primordiales en la vida del hombre y de los mamíferos en general, la formación de gametas masculinas, los espermatozoides y la secreción de hormonas masculinas fundamentalmente la testosterona. Ambas funciones están bajo el control de un complejo mecanismo regulatorio que involucra al sistema hipotálamo–hipofisario y a un importante número de factores locales. La función de síntesis hormonal es cumplida esencialmente por las células somáticas del testículo, Leydig y Sertoli, en  tanto que la gametogénesis tiene lugar en las células germinales del túbulo seminífero que se dividen por meiosis. A diferencia de otros órganos esteroidogénicos como la suprarrenal o el ovario, el principal andrógeno sintetizado por el testículo actúa como tal pero también luego de su metabolización a otras hormonas esteroideas como el compuesto    5-a reducido: dihidrotestosterona (DHT) y estradiol. Las hormonas testiculares cumplen funciones diferentes según la etapa de la vida del individuo. Ellas desempeñan un papel fundamental en la diferenciación sexual durante el período embrionario-fetal, cumplen el importante rol de inducir la maduración sexual en la pubertad, contribuyen durante toda la vida a mantener los caracteres sexuales secundarios y regulan la espermatogénesis en los sucesivos períodos del desarrollo, desde el período embrionario-fetal hasta el adulto o el anciano. Por consiguiente, las anormalidades de la función testicular, repercutirán según la etapa de la vida en que ocurran desde la gestación hasta la vejez. Los mecanismos regulatorios si bien presentan similitudes tienen características propias de cada una de las etapas de la vida.