IDH   23901
INSTITUTO DE HUMANIDADES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Filosofía: tradición y catacumbas. Acerca de una historia de la filosofía en Argentina
Autor/es:
GALFIONE, MARÍA CARLA
Lugar:
Mendoza
Reunión:
Congreso; VII CONGRESO INTEROCEÁNICO DE ESTUDIOS LATINOAMERICANOS; 2022
Institución organizadora:
Universidad Nacional de Mendoza
Resumen:
El vínculo entre la filosofía y su historia es una cuestión de peso a la hora de definir las coordenadas básicas del saber filosófico. Las historias de la disciplina pueden ser descubiertas como parte importante en la constitución de su perfil y condiciones. Suponen al menos una selección de autores y obras, así como un modo de encadenar el relato, estableciendo prioridades, jerarquías y articulaciones. Explicitando o no sus supuestos, estas historias configuran el canon, tanto en el sentido de lo que debe leerse, cuanto en lo relativo al modo en que debe abordarse el pasado señalado como filosófico. Se determinan allí una serie de condiciones que delimitan el universo de lo dicho y decible en tanto parte de la disciplina.En Argentina, contamos con pocas historias de la filosofía consagradas. Entre éstas se encuentra la de Alberto Caturelli. En la ponencia, me concentro en el análisis de sus escritos históricos para reconstruir desde ahí su concepción de lo que era y debía ser la filosofía desarrollada en Argentina. La estructura del discurso, el modo en que se define y delimita el objeto de estudio, y se propone una cierta temporalidad sobre la cual se ordena ese objeto y sus momentos, el modo de articulación del relato y de encadenamiento de aquellos momentos, el método y los materiales de trabajo, la selección y valoración de diversas expresiones, entre otras cosas, son elementos que permiten reconocer las coordenadas fundamentales de su propuesta. Allí, la historia de la filosofía, no sólo opera modelando las lecturas, sino también como condición misma del quehacer filosófico.Esa historia señala una particularidad y un protagonismo para la filosofía desplegada en estas latitudes. Y en ese marco, la Universidad de Córdoba ocupa un lugar señero, por cuanto fue cuna de las primeras expresiones a ser consideradas. Desde allí, la Universidad parece funcionar como garantía de la verdad filosófica.Parte de la impronta de Caturelli se vincula a su paso por la Facultad de Filosofía y Humanidades de la UNC, en donde ocupó cargo docente desde 1956, por más de treinta años. Su propuesta para la filosofía y la historia de la filosofía tuvo su marco de posibilidades y legitimación en este escenario. Asimismo, el vínculo que establece entre el pasado filosófico y la Universidad se prolonga hacia su propio presente, en sus consideraciones sobre el perfil y las funciones que debía tener la institución. De este modo, me pregunto en qué medida su relato histórico-filosófico puede ser considerado parte de una red mayor que busca delimitar las condiciones del saber filosófico que imparte la Universidad, con efectos sentidos en lo que hace a la definición de ese marco institucional.