“Ni fuera de mí ni dentro sino las dos cosas”: la construcción de un cuerpo liminar en Alejandra Pizarnik y Armonía Somers

NÚRIA CALAFELL SALA

Frontera y género. En los límites de la multidisciplinareidad

MADRID

Año: 2011; p. 75 - 86

En 1962, Alejandra Pizarnik escribió: «Aun mis instantes de éxtasis poético se refieren al cuerpo. Instantes báquicos, inatención. Ni fuera de mí ni dentro sino las dos cosas. Participación en un mundo irrespirable, infantil, coloreado, lleno de músicas y silencios». Poesía y cuerpo, ni dentro ni fuera sino las dos cosas, la coincidentia oppositorum toma posiciones y traslada al sujeto a un mundo anterior espacio de la infancia- y paradójico, en el que tiene lugar la avenencia de conflictos y tensiones. Doce años antes de esta anotación, había aparecido en Uruguay la novela corta La mujer desnuda de Armonía Somers, donde a estas cuestiones se añadía un componente de crítica sociocultural de sumo interés. El texto, de marcado carácter trasgresor, se constituía en metáfora del sacrificio femenino a través de un cuerpo que se vapulea, se fragmenta y se resignifica en aras de una estabilidad social, cultural e incluso económica.