INVESTIGADORES
CALAFELL SALA NÚria
artículos
Título:
Recorridos de lectura: Antonin Artaud y Alejandra Pizarnik
Autor/es:
NÚRIA CALAFELL SALA
Revista:
Prosopopeya. Revista de crítica contemporánea
Editorial:
TIRANT LO BLANCH
Referencias:
Año: 2009 p. 159 - 178
ISSN:
1575-8141
Resumen:
En 1965 Alejandra Pizarnik (Avellaneda, 1936-Buenos Aires, 1972) publica en la revista Sur un conjunto de poemas traducidos de Antonin Artaud y los precede de un prólogo[1]. El texto, titulado El verbo encarnado por oposición al juego propuesto nueve años antes por Octavio Paz en El verbo desencarnado (Paz, 2004: 232-250), partirá del binomio cuerpo/lenguaje para intentar desentrañar, en unas pocas páginas, el sentido escritural y vital de una de las voces más estremecedoras del siglo XX. Secundando la separación propuesta por un estudioso de la obra del francés, la escritora traza el itinerario de su propia lectura, marcando ya las pautas que la han de identificar a ella también: Lo que más me asombra del período blanco de Artaud escribe- es su extraordinaria necesidad de encarnación mientras que en el período negro hay una perfecta cristalización de esa necesidad (1965: 37)[1] Ana Becciu, en la recopilación de la narrativa pizarnikiana, lo incluye en el apartado Artículos y ensayos (Pizarnik, 2002: 269-273), pero no tiene en cuenta la traducción de los cinco textos que acompañan el artículo: dos poemas, un Fragmento de Van Gogh le suicidé de la société , un Fragmento de Pour en finir avec le jugement de dieu y un Post-scriptum de Le théâtre de la cruauté . Sin embargo, no es la única que incurre en este error: ni la antología El deseo de la palabra (Pizarnik, 1975: 237-242), preparada por la autora, Antonio Beneyto y Martha I. Moia; ni la compilación de Gustavo Zuluaga (Pizarnik, 1987: 63-67), dan cabida a estas significativas versiones que, de algún modo, funcionan como para-textos al estudio. Una hojeada rápida descubre que son fragmentos cargados de un valor corporal determinado por una violencia y una destrucción que se entienden como camino a una recolocación del cuerpo. Baste como ejemplo el principio del Fragmento de Pour en finir avec le jugement de dieu : Quien siente dolor en los huesos como yo / no tiene sino que pensar en mí / no me alcanzará en espíritu por el camino de los espacios / pues ¿para qué alcanzar a un ser en espíritu / y no alcanzarlo en cuerpo? (vv. 1-5; en Pizarnik, 1965: 51). Por último, señalar que existen más traducciones de la argentina recogidas en Artaud, 2001b.