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Damasia Becú es la primera presidenta en la historia de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires
La investigadora del CONICET y ex directora del Instituto de Biología y Medicina Experimental es la primera mujer elegida como presidenta desde la fundación de la ANCBA en 1935.
Damasia Becu-Villalobos, investigadora superior del CONICET en el Instituto de Biología y Medicina Experimental (IBYME, CONICET-FIBYME), fue elegida primera mujer presidenta de la Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires (ANCBA).
Sobre su nombramiento, la investigadora expresó: “Nunca pensé llegar a presidir una Academia de Ciencias, así que mi primer sentimiento fue de sorpresa, agradecimiento, y pequeñez ante la tarea”. Y agregó, “Ser la primera mujer en presidir la ANCBA me llena de alegría, porque demuestra que la seriedad y el trabajo se premian más allá del género. Nuestra Academia fundada en 1935 siempre fue conducida por hombres, con poca participación de mujeres en los sitiales titulares, y menos aún en las mesas directivas. Creo que las mujeres tenemos formas distintas de conducir, y agradezco el gran consenso en la votación que me eligió”.
La Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires fue fundada el 8 de octubre de 1935 por un grupo de 18 científicos. Su misión es promover las actividades científicas en el país en beneficio de sus habitantes y proveer asesoramiento multidisciplinario independiente sobre cuestiones atinentes a las ciencias, la técnica y su filosofía. Está constituida por 35 miembros Titulares, llamados también “de Número”, a los que se suman los Académicos correspondientes, eméritos y honorarios.
El 18 de octubre pasado, la ANCBA, reunida en Asamblea Anual Ordinaria, procedió a designar la nueva Mesa Directiva para el período 2021-2023, quedando liderada por Damasia Becú como presidenta quien, además, es directora del Laboratorio de Regulación hipofisaria del IBYME y desarrolla sus investigaciones en el área de la Neuroendocrinología con numerosas publicaciones a nivel nacional e internacional.
“De aquí en adelante empieza una tarea de aprendizaje, de forjar consensos y crecer en los disensos, de mantener las tradiciones, y a la vez crear espacios nuevos, de crecimiento de la Institución. Es un gran desafío coordinar el trabajo de Académicos Ingenieros, Físicos, Sociólogos, Filósofos, Biomédicos, Abogados, Ecónomos, Estadísticos, Astrónomos, para estudiar problemas que preocupan a la sociedad con una mirada amplia e interdisciplinar”, concluyó la investigadora.