Leer y escribir las prácticas culinarias. El aporte de Petrona C. de Gandulfo en el proceso de formación de la subjetividad de los Argentinos, años 1930

PAULA CALDO

La Plata

Jornada; XIV Jornadas Argentinas de Historia de la Educación. Habitar la escuela, producciones, encuentros, conflictos; 2006

Sociedad Argentina de Historia de la Educación, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de La Plata

“Leer y escribir las prácticas culinarias…” es una ponencia que se desprende de un ejercicio de investigación mayor sobre las estrategias pedagógicas que envolvieron al recetario de Petrona C. De Gandulfo, convirtiéndolo en una herramienta para enseñar a las amas de casa argentinas el arte de cocinar. Dicho ejercicio queda anclado en la lectura en profundidad de una fuente única, como ya se anticipó, se trata del Libro de doña Petrona exclusivamente en su primera edición del año 1934. En consecuencia, no deja de ser una investigación cualitativa, bibliográfica e inscripta en el microanálisis y en las dimensiones de la historia sociocultural. En una lectura y apuesta interdisciplinaria la historia, la antropología y la pedagogía se solidarizan para dar cuerpo al análisis pedagógico de la primera edición del libro de Petrona. Sin dicho cruce interdisciplinario esta interpretación sería imposible. Un libro, el de Petrona, un año, 1934 cuyo sentido sólo se aprehende en la clave de la década de 1930, un espacio, Argentina que seguidamente puede acotarse a Buenos Aires y a los sectores de elite; son las primeras cuestiones que delimitamos para sostener el estudio. Petrona en 1934 escribe un libro destinado a transmitir el saber culinario y a formar cocineras. Nuestra pregunta busca desocultar aquellos mecanismos que aseguraron a la autora el carácter prescriptivo de su texto. Petrona menos que cocinar escribe las prácticas. Las escribe en forma de recetas y sus lectoras deberán apropiarse de ellas mediante la lectura. Escribir y leer, dos verbos que se ponen en juego en el espacio escolar y que trasuntan hacia la puesta en práctica del aprendizaje en otros ámbitos de la cultura. Vamos a cuestionarnos sobre los qué, cómo y porqué de escribir las prácticas culinarias y de leerlas para aprender. Suponemos que lejos de las escuelas encontramos, en un espacio menor y minúsculo como la cocina, la puesta en acto de prácticas muy caras al acontecer escolar. Cuatro son los ejes son los que cristalizan en el cuerpo de este escrito: El contexto en el que Petrona se vuelve educadora: los circuitos de educación extraescolar en los años treinta. El contenido conceptual: la cocina que elige transmitir Petrona, sus qué, cómo y por qué. Escribir las prácticas culinarias, de cocinera a escritora. Las marcas de lectura que el libro sugiere para asegurar el pasaje de lectora a alumna.