ENyS (CONICET-HEC-UNAJ) - RAGCyT
Tercer encuentro del ciclo virtual “Cerebro y Mujer II: Mitos, Realidades, Distintas Perspectivas”
Del mismo participaron, la filósofa e investigadora, Diana Maffía y la abogada especialista en Inteligencia Artificial, Derecho y Género, Cecilia Danesi. El próximo encuentro será el 16 de julio a las 18h.
Se llevó adelante el tercer encuentro del ciclo virtual “Cerebro y Mujer II: Mitos, Realidades, Distintas Perspectivas”, organizado por la Unidad Ejecutora de Estudios en Neurociencias y Sistemas Complejos (ENyS, CONICET-HEC-UNAJ) y la Red Argentina de Género, Ciencia y Tecnología.
Para ver el tercer encuentro virtual completo haga click aquí.
Diana Maffía, Doctora en Filosofía (Universidad de Buenos Aires) y Directora del Observatorio de Género en la Justicia del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires fue la encargada de la primera charla.
“Género y testimonio. De la injusticia epistémica al reconocimiento”
Durante su exposición, Maffía, remarcó la importancia del evento y la relevancia de la charla en sí:“Es un tema que tiene que ver con el cerebro porque tiene que ver con la reconstrucción de la memoria, con la experiencia y como transformar esa experiencia y memoria en testimonio que pueda ser útil en las instancias judiciales. Me parece que un encuentro de este tipo es muy importante para pensar una justicia que sea apropiable democráticamente para toda la ciudadanía. No dejemos la justicia en manos de la gente que estudia Derecho porque es muy incompleta, entonces tenemos que pensar democráticamente en una justicia interdisciplinaria que no sea solamente aplicar rigurosamente determinado tipo de códigos y que deja tanto al arbitrio de los jueces y juezas que con su experiencia completan lo que se supone que escuchan por parte de quienes son justiciables”.
Luego de realizar un recorrido teórico y conceptual al que conectó con distintos hechos y experiencias, Maffía, quien también es investigadora del Instituto Interdisciplinario de Estudios de Género de la UBA y una de las fundadoras de la Red Argentina de Género, Ciencia y Tecnología (RAGCyT), reflexionó: “Hay mucho que hacer desde el feminismo y uno de los aportes es desde la epistemología feminista por eso me interesó pensar para esta jornada algo que tiene que ver con derechos humanos, epistemología y feminismo”.
“¿Sesgos algorítmicos o sesgos humanos?”
Por su parte, la Doctora Cecilia Danesi, abogada (UBA) especialista en Inteligencia Artificial (IA), Derecho y Género, presentó su charla llamada “¿Sesgos algorítmicos o sesgos humanos?”
Después de comenzar con una pregunta disparadora: “¿Por qué es importante que las ciencias sociales participen de la construcción de los sistemas de inteligencia artificial (IA)?”, y luego de explicar cómo funciona la inteligencia artificial que busca emular al cerebro humano y consiste en hacer predicciones futuras en base a datos del pasado, Danesi sentenció: “Por eso se considera que los datos son el petróleo de nuestra era, porque gracias a los datos podemos desarrollar sistemas de inteligencia artificial”.
Posteriormente, definió ¿Qué son los sesgos algorítmicos? “El sesgo está en el algoritmo pero no está originado en el algoritmo porque el sesgo algorítmico consiste en la transferencia de los sesgos (prejuicios) de los valores humanos en la tecnología. Entonces, no es el sesgo algorítimico el problema sino el sesgo humano y esto no sucede solo en la IA, todos transferimos nuestros valores a lo que hacemos. ¿Por qué debemos alertarnos con los sesgos algorítmicos? Porque la inteligencia artificial tiena la capacidad de afianzar y agrandar las brechas sociales existentes, el bucle de retroalimentación pernicioso, según la definición de Cathy O’Neil, matemática estadounidense”, explicó la abogada que abrió la primera asignatura de la Facultad de Derecho de la UBA en IA y, en esa Facultad es coordinadora de la rama de IA del proyecto de investigación UBACyT, ENTED.net y del IALAB; Laboratorio de Innovación e Inteligencia Artificial que desarrolló PROMETEA .
Como conclusión, Danesi, sostuvo: “Vivimos en una sociedad hecha por y para hombres, entonces necesitamos mayor diversidad, supervisión, cajas blancas y una regulación robusta que nos defienda y nos ampare frente a la cuarta revolución industrial que ya llegó y sigue creciendo exponencialmente día a día”.
