INVESTIGADORES
VARGAS evelyn teresita
congresos y reuniones científicas
Título:
El pragmaticismo y el ‘espíritu del leibnizianismo
Autor/es:
VARGAS, EVELYN
Lugar:
Caldas
Reunión:
Congreso; II Congreso de la Sociedad Latinoamericana Peirce; 2021
Institución organizadora:
Sociedad Latinoamericana Peirce; Universidad de Caldas
Resumen:
En un manuscrito de 1911 destinado a una colección de ensayos en honor a Lady Welby Peirce asegura que siempre atribuyó la paternidad de su pragmaticismo a Kant, Berkeley y Leibniz (EP 2: 457 / OFR 2, 546). Y aunque la vinculación con el pensamiento de Kant o Berkeley ha sido ampliamente estudiada, resulta menos evidente cuál podría ser la relevancia del pensamiento leibniziano en el desarrollo del pragmatismo de Peirce. Por una parte, abundan en sus escritos las referencias críticas al filósofo de Hannover. Leibniz es no solo el más nominalista de los pensadores modernos (EP 2: 157), sino que “un punto ciego en su retina lógica” le habrían impedido ver la inconsistencia de algunas de sus doctrinas metafísicas más características con su reconocimiento de la ley de continuidad (CN II, 186). Por otra parte, la atribución mencionada en el manuscrito parecería implicar la permanencia de la concepción pragmatista desde su pensamiento temprano. Sin embargo, sostendré que, a pesar de estas dificultades interpretativas, resulta de interés poner de relieve los puntos de convergencia a partir de los cuales dar sentido a la filiación declarada. En primer lugar, es conocida la oposición leibniziana a la filosofía cartesiana. En efecto, en cuestiones epistemológicas su anticartesianismo lo llevó a considerar la duda universal cartesiana no solo como ficticia, sino también como incapaz de alcanzar su fin (GP 4. 356). En su práctica argumentativa multiplica los puntos de vista sobre el objeto investigado; a los estrictos límites de lo cognoscible para el entendimiento impuestos por Locke (E IV, iii, 1-6) opone el “horizonte de la doctrina humana” siempre desplazable; la certeza no puede ser privada (NE IV, ii, 14). Pero es justamente aquella capacidad cognitiva que el cartesianismo considera la base de la certeza, el objeto central de la crítica de Peirce y de Leibniz. Tempranamente Peirce multiplica los argumentos en contra de la intuición en tanto capacidad cognitiva humana no determinada por cogniciones previas (por ejemplo, EP 1: / OFR 1, 55; 74.) Para Leibniz representa la punta de lanza de su rechazo de la concepción de idea de Descartes, y se contrapone conceptualmente a la cognición ciega o simbólica en tanto mediada por signos o caracteres (A6. 4. 590), y necesaria en toda clase de conocimientos (A6.4.1815). Así lo entiende Peirce, que no solo opone la cognición ciega leibniziana a la cognición intuitiva (EP 2: 361 / OFR 2, 443), sino que vincula a aquella expresamente con la semiósis, y, consecuentemente, con “la opinión pragmatista,” al menos en un sentido amplio (Ibid.). Mi objetivo en este trabajo será entonces examinar el alcance de estas semejanzas que Peirce parece reconocer entre sus concepciones y las doctrinas leibnizianas, y confrontarlas con sus respectivas consecuencias para el rol de la visualización en los procesos inferenciales, que ambos filósofos introducen, a fin de identificar las diferencias que tengan relevancia para la cognición. De este modo, la perspectiva adoptada es exegética, pero también epistemológica.