Las mil y un querencias: Heterogeneidades del diálogo afectivo en la periferia del mundo

VALLEJOS, JUAN IGNACIO; AGUILAR, PAULA LUCÍA

Contratiempos: Espacios, tiempos y proyectos en Buenos Aires de hoy

Ediciones del Instituto Movilizador de Fondos Cooperativos

Lugar: Buenos Aires; Año: 2005; p. 175 - 202

El presente trabajo forma parte de un proyecto mayor, dirigido por Susana Murillo, que estudia la transformaciones que se estarían operando en la construcción de la subjetividad en los habitantes de la Buenos Aires actual. Nuestro estudio se propone específicamente evaluar en qué medida las prácticas afectivas contribuyen, hoy en día, a la construcción de nuevos sentidos que se enfrentan al vacío y a la incertidumbre. Consideramos que las relaciones vinculares afectivas se ubican necesariamente en el lugar del diálogo, de la comunicabilidad, del intercambio con el otro, mediado por la cultura, una instancia en donde se pone en juego la construcción de la propia vida narrada (Ricoeur, 1994). Las características del encuentro afectivo, las formas que adoptan los vínculos, su posibilidad de perdurar o no en el tiempo, son a grandes rasgos, facetas de esta esfera de comunicabilidad. Si bien las RVA pueden ser definidas como los lazos primarios de un sujeto, no quedan circunscritas a la intimidad de la casa, de la familia o de la pareja. Ante la caída de la concepción moderna de progreso y temporalidad lineal, la vivencia de los sujetos con respecto al tiempo resulta un elemento clave a la hora de hacer posible la construcción de un relato propio. La ausencia de un horizonte de expectativas claro, produce en el presente un sin sentido creciente. La sensación de que nada a largo plazo puede suceder, se afirma como única y paradójica certeza. Como conclusión de nuestro trabajo podemos afirmar que a pesar de la heterogeneidad afectiva o sexual en la que se inscriben los sujetos de hoy en día, la institución pareja sigue siendo un relato central y organizador de nuestra sociedad. Ciertamente, se han flexibilizado sus formas pero ante el terror omnipresente de ser excluido, la institución pareja funciona sin lugar a dudas como un mecanismo de inclusión.