BECAS
SULCA elisa martina De Los Ángeles
capítulos de libros
Título:
Amor, derecho y solidaridad como esferas de reconocimiento. La perspectiva de Axel Honneth
Autor/es:
SULCA, ELISA MARTINA DE LOS ÁNGELES; KAPLAN, CARINA VIVIANA; ORBUCH, IVÁN
Libro:
Emociones, sensibilidades y escuela
Editorial:
Homo Sapiens Ediciones
Referencias:
Lugar: Buenos Aires ; Año: 2022; p. 103 - 119
Resumen:
Axel Honneth nació en 1949 en la ciudad de Essen, Alemania. Estudió filosofía y sociología en la Universidad de Bonn y en la Universidad Libre de Berlín. Se doctoró en el Instituto Max Planck de la ciudad de Múnich bajo la dirección de Jürgen Habermas. Se desempeñó como director del Instituto de Investigación Social de la Universidad de Frankfurt. Es considerado el pensador más importante de la tercera generación de la Escuela de Frankfurt por su teoría del reconocimiento. Honneth esboza una actualización sistemática del proyecto de la teoría crítica elaborada por las dos primeras generaciones de la Escuela de Frankfurt. El “déficit sociológico” en las formulaciones de sus antecesores radica “en el análisis meramente normativo de la sociedad capitalista” (Honneth, 2011, p. 141). Para salir de este estancamiento se centra en las “heridas morales” causadas por las experiencias de menosprecio como la violencia física, la humillación, la desvalorización y la vergüenza social. Su propósito es “generar una teoría que permita construir un puente entre subjetividad y orden político, que brinde una explicación a las diferentes formas de sufrimiento y no justificaciones normativas” (Honneth et al, 2016, p. 121). En este marco, el giro intersubjetivo de la teoría crítica da cuenta de la relación entre las experiencias de menosprecio, el conflicto social y la ampliación de las formas de reconocimiento. En La idea del socialismo. Una tentativa de actualización (2017) Honneth afirma que el malestar de las masas ante las consecuencias socioeconómicas del capitalismo no logró generar un movimiento transformador y superador ya que impera una demanda por la libertad individual más que por la libertad social. Para hacer posible el proyecto del socialismo, en tanto camino para la construcción de una sociedad más justa e igualitaria, es necesaria la organización de movimientos colectivos y de ciertas condiciones institucionales que aseguren la ampliación y la consolidación del ejercicio de las libertades en un contexto de cooperación social (Honneth, 2011). La democracia tendrá lugar cuando los principios de justicia dejen de ser un asunto formal y se edifiquen sobre la base de las acuciantes demandas morales de los sectores sociales históricamente excluidos. Para ello es necesario prestar atención a cómo se articulan los sentimientos de injusticia de los sujetos verdaderamente afectados, puesto que muchas veces están codeterminados por los intereses de la clase dominante con el objetivo de asegurar la hegemonía cultural mediante el control de la conciencia moral. Una pregunta emergente de este planteo es “por qué las visiones del socialismo no tienen, hace tiempo, la fuerza de convencer a los implicados de que, con el esfuerzo colectivo, lo aparentemente ‘inevitable’ podría modificarse en pos de algo mejor” (Honneth, 2017, p. 23).