INVESTIGADORES
LOMBARDI olimpia Iris
congresos y reuniones científicas
Título:
La flecha del tiempo en la física
Autor/es:
OLIMPIA LOMBARDI; NICOLÁS MOYANO LOZA
Lugar:
San Sebastián
Reunión:
Congreso; X International Ontology Congress: Physis, from elementary particles to human nature; 2012
Institución organizadora:
Universidad de País Vasco y Universidad Autónoma de Barcelona
Resumen:
El problema de la flecha del tiempo se encuentra enraizado en nuestra percepción inmediata del antes y el después: la diferencia entre pasado y futuro ocupa un lugar central en nuestras vidas en la medida en que organiza toda otra percepción. Experimentamos el orden del tiempo en el mundo como ?direccionado?: si dos eventos no son simultáneos, uno de ellos ocurre previamente al otro. Además, percibimos nuestro acceso al pasado y al futuro de forma completamente diferente: recordamos el pasado y predecimos el futuro. El intento de explicar esta direccionalidad ha sido de particular interés en la filosofía. El problema de la flecha del tiempo ingresa a la filosofía de la física cuando se busca un correlato físico de esta asimetría intuitiva entre pasado y futuro: ¿las teorías físicas escogen una dirección preferida del tiempo? La dificultad principal para encontrar una respuesta a esta pregunta reside en nuestra perspectiva antropocéntrica: la diferencia entre pasado y futuro está tan profundamente arraigada en nuestro pensamiento que nos resulta muy difícil desembarazarnos de esta asimetría temporal. Por lo tanto, si pretendemos abordar el problema de la flecha del tiempo en física desde una perspectiva purgada de nuestras intuiciones temporales, debemos evitar toda conclusión que se derive de presuponer nociones temporalmente asimétricas (Price 1996). Una vez adoptada este enfoque atemporal, el problema reside en identificar la asimetría temporal en las leyes de la física. La respuesta tradicional a este problema ha consistido en identificar la dirección pasado-a-futuro con la dirección del aumento de entropía de los sistemas cerrados, en particular, del universo. Sin embargo, si se admite que la direccionalidad temporal es una propiedad del tiempo mismo, la flecha del tiempo resulta ontológicamente previa a las propiedades entrópicas. Ello conduce a adherir a la ?Herejía de la Dirección del Tiempo?, según la cual la flecha del tiempo es una característica intrínseca del espacio-tiempo ?que no requiere ni puede ser reducida a características no-temporales? (Earman 1974, p.20). Sobre la base de esta doble perspectiva atemporal y ?herética? es posible abordar el problema de la direccionalidad temporal desde un enfoque global y no-entrópico, según el cual la flecha del tiempo es una propiedad geométrica del espacio-tiempo en su conjunto (Castagnino, Lara y Lombardi 2003a, 2003b, Castagnino Lombardi y Lara 2003). A su vez, esta flecha geométrica global se manifiesta a nivel local como un flujo de energía que apunta en el mismo sentido temporal en todos los puntos del espacio-tiempo (Aiello, Castagnino y Lombardi 2008, Castagnino y Lombardi 2009). El propósito del presente trabajo consiste en discutir esta tesis desde una perspectiva ontológica. En particular, se argumentará que este enfoque global y no-entrópico exige admitir que dos soluciones temporalmente especulares de las ecuaciones de campo de Einstein de la relatividad general son descripciones equivalentes de uno y el mismo universo (cfr. Reichenbach 1956, Gold 1966, Hawking y Ellis 1973). Esta tesis de equivalencia, a su vez, se apoya en la adopción de un supuesto acerca del status ontológico del espacio-tiempo y, a fortiori, del tiempo: el espacio-tiempo no es ontológicamente previo al universo ya que no existe espacio-tiempo independientemente del universo mismo, y ello tiene influencias directas sobre el modo de interpretar las transformaciones de simetría, entre las cuales se encuentra la inversión temporal (para una discusión actualizada acerca de las simetrías en física, cfr. Brading y Castellani 2007). Tal supuesto, no obstante, no implica la adopción de una concepción relacionalista del espacio-tiempo. En efecto, tal como afirma Earman (1989), la relatividad general finalmente nos conducirá a una concepción del espacio-tiempo que no se ajusta por completo ni al sustancialismo ni al relacionalismo tradicionales.