Desafíos y recorridos del paradigma de comunidad aplicado a las sociedades originarias americanas

DIANA LENTON

Bariloche

Workshop; V Coloquio Anual IIDYPCA 2013 - Pertenencias comunitarias en/del siglo XXI en perspectiva trans-diciplinar; 2013

IIDYPCCA, CONICET

A partir de la segunda mitad del siglo XX, surge el concepto de comunidad como clave de interpretación de características atribuibles a formaciones sociales ?alternativas? y/o en vías de incorporación al desarrollo occidental, y como proyección moralista de utopías más o menos definidas. El paradigma desarrollista que hegemonizó la política regional por largas décadas, se combinó con el de community studies para hallar una forma ?definitiva? de abordar las sociedades americanas y canonizar a la comunidad como término que vino a reemplazar a otros de gran aceptación anterior, como tribu, nación, linaje, familia, etc. Reflejado en numerosas agencias de ?Desarrollo de Comunidades? de distinto nivel, en el caso argentino esta combinación atravesará todo el esquema de la política indigenista nacional, y se hará irreversible tras su adopción y sanción por la ley 23302, en 1985. Si por un lado, el paradigma de la comunidad conllevó malos entendidos culturales e imposiciones hegemónicas, también debe reconocerse que significó una apertura no desdeñable para el reconocimiento de nuevas estructuras sociales que no podían ser contenidas por los antiguos conceptos, especialmente las derivadas de procesos de etnogénesis y de nuevos contextos de urbanización y proletarización. La pretensión de homogeneidad interna que el sentido común extiende sobre las comunidades se nutre de las tradiciones judeocristianas tanto como de movimientos antisistémicos contemporáneos. En nuestro país, y culminando los años 70, las comunidades eclesiales de base dejaron su impronta tanto como las diversas organizaciones agrarias. En los últimos años, parecen haberse fortalecido los procesos de creación y reconstitución de comunidades, que gozan de un reconocimiento oficial que a veces compite con el de los pueblos y naciones a las que las mismas pertenecen. Plantearemos la problemática y los desafíos abiertos por la persistencia del concepto de comunidad, los nuevos sentidos que la coyuntura política y jurídica le imponen, y su relación con otras variables de organización tradicional.