Fármacos de uso humano en ambientes acuáticos de Argentina. Disertación en mesa redonda ATA-SETAC: ?Contaminantes emergentes: impacto sobre la biota silvestre?

CARRIQUIRIBORDE, P.

Ciudad Autónoma de Buenos Aires

Congreso; XXI Congreso Argentino de Toxicología ?Creando oportunidades frente a los nuevos desafíos desde la Toxicología?; 2019

Asociación Toxicológica Argentina

Los contaminantes emergentes, en contraposición a los contaminantes tradicionales, reúne a un conjunto de sustancias que no son actualmente considerados en las normativas de calidad de agua, pero que pueden representar un riesgo para el ambiente. Entre ellos, los compuestos farmacéuticos y los productos de cuidado personal han despertado desde hace ya más de una década preocupación en la comunidad científica internacional por el riesgo que pueden representar para los ambientes acuáticos. En particular los fármacos de uso humano son eliminados a través de la orina y las heces alcanzan, o por descartes, principalmente en los sanitarios y de no ser eficientemente retenidos por los sistemas de tratamiento de líquidos cloacales, cuando existen, alcanzan los cuerpos de agua. En nuestro país se ha reportado la presencia de dichos compuestos tanto en los efluentes cloacales como en aguas superficiales, siendo la carbamazepina, el atenolol, diclofenac, ibuprofeno, enalapril, EE2, E2 y E1 los reportados más frecuentemente. Además, casi una veintena de fármacos de huso humano han sido detectados en peces del Río Uruguay, Paraná y Suquía. Estos resultados demuestran que los fármacos de uso humano no sólo son capaces de alcanzar los cuerpos de agua, sino que además son capaces de ser acumulados por la biota acuática. Dado que los fármacos suelen ser sustancias elativamente polares y poseer grupos químicos que dependiendo del pH pueden estar cargados, suelen no alcanzar niveles de acumulación muy elevados, pero ello varía mucho en función de la naturaleza química del fármaco y de las características del ambiente. Por otra parte, existen estudios que advierten de potenciales efectos adversos que algunos de ellos pueden causar sobre la biota acuática. Sin embargo, considerando la diversidad de compuestos y de los modos de acción que poseen y la sensibilidad diferencial que pueden presentar las diferentes especies, es necesario contar con criterios que permitan priorizar los estudios dirigidos a evaluar el potencial riesgo que estas sustancias pueden representar para los ambientes acuáticos de nuestro país.