INVESTIGADORES
CUITIÑO jose Ignacio
congresos y reuniones científicas
Título:
Sedimentología y geometría de un cuerpo tobáceo en el tope de la Formación Centinela, sudoeste de la provincia de Santa Cruz
Autor/es:
CUITIÑO, JOSÉ IGNACIO; SCASSO, ROBERTO ADRIÁN
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; XII Reunión Argentina de Sedimentologia; 2008
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Sedimentología
Resumen:
Las facies aquí descriptas corresponden a los términos superiores de la Formación Centinela (Furque y Camacho, 1972), nombre formal con el que se conoce al “Patagoniano” en el sudoeste de la provincia de Santa Cruz. Sus mejores afloramientos se encuentran en las serranías al sur de la localidad de El Calafate, entre los ríos Centinela al oeste y Bote al este. Típicamente consiste de areniscas finas y medianas, de coloraciones pardo claras, en parte tobáceas, en las que se reconocen numerosas estructuras de mareas e intercalan potentes bancos fosilíferos, compuestos por invertebrados marinos, principalmente ostras de gran tamaño con otros bivalvos asociados. Son comunes también las faunas de gasterópodos y crustáceos (decápodos). La edad de esta formación se ubica en el Oligoceno superior a Mioceno inferior, basado en datos micropaleontológicos (Casadío et al., 2000; Guerstein et al., 2004) y por estar superpuesta por la Formación Santa Cruz, de ambiente continental, cuya base se ubica en el Mioceno inferior (Fleagle et al., 1995). La localidad estudiada se encuentra a unos 10 km al este de El Calafate, en las inmediaciones de la Estancia Quién Sabe, en donde afloran 190 metros de sedimentitas marinas, asignables a la Formación Centinela, que culminan con facies finas de carácter transicional a un ambiente litoral y continental de baja energía. En los últimos 30 metros de afloramiento aparece intercalado un gran cuerpo blanquecino de tobas soldadas, de base neta sobre areniscas pardas con estratificación entrecruzada en artesas. El tamaño de grano es de arenisca fina a muy fina,  con estructuras de bajo régimen de flujo y dominante laminación horizontal. En la base se reconocen tobas, compuestas por trizas y fragmentos pumíceos angulosos, con escasos cristaloclastos de cuarzo, feldespatos y biotita, y en donde son frecuentes las láminas horizontales que concentran clastos pumíceos mayores y restos vegetales carbonizados. Hacia arriba las tobas se tornan finas y de coloración grisácea, con estratificación cruzada de bajo ángulo en láminas delgadas, sin concentración de pómez ni restos carbonosos. A escala de afloramiento se observa una clara geometría lenticular, alcanzando el cuerpo sedimentario un espesor máximo de 11 metros y acuñándose hacia los lados hasta desaparecer. Su base es cóncava hacia arriba y el techo plano, dando lugar a una geometría de canal, con una extensión lateral que alcanza los 100 metros aproximadamente. Este nivel es clave ya que se encuentra en el límite entre la Formación Centinela (marino somero) y la Formación Santa Cruz (fluvial de baja energía). Su forma acanalada y sus estructuras de baja energía estarían marcando un evento volcánico explosivo, que ahogó los sistemas de drenaje en un ambiente litoral rellenando la topografía preexistente. Sus características petrográficas hacen factible la datación radimétrica, actualmente en curso, ya que los componentes no muestran rasgos de retrabajo y se espera obtener una edad confiable para el techo de la Formación Centinela en la región.