BECAS
SALAZAR BURGOS Ramiro JoaquÍn
congresos y reuniones científicas
Título:
Ruralidad y pobreza en Tucuman: un analisis de las transformaciones y persistencias ocurridas entre 2001 y 2010
Autor/es:
SALAZAR BURGOS, R.; MONTENEGRO, D.
Lugar:
San Miguel de Tucuman
Reunión:
Congreso; Congreso Internacional de Educacion y Politica. En el camino hacia un Nuevo Humanismo.; 2019
Institución organizadora:
Facultad de Filosofia y Letras ? Universidad Nacional de Tucuman
Resumen:
En América Latina, el mayor número de personas pobres reside en los grandes centros urbanos, sin embargo, en términos relativos, es mayor el porcentaje de pobres viviendo en zonas rurales, respecto a los urbanos. Este fenómeno comenzó a generalizarse en la región a mediados de los años ochenta (Schejtman, 1994). En Argentina, la población rural representa el 9,1% del total de habitantes (INDEC, 2010). Esta proporción de personas, en clara inferioridad numérica a la urbana, presenta numerosas condiciones de vulnerabilidad que se reflejan en aspecto socio-económicos como peor educación, salud, vivienda, empleo? y, básicamente, en mayor pobreza. Actualmente en Argentina, al igual que sucede en la mayor parte de Latinoamérica, es mayor el número de personas en condiciones de pobreza viviendo en los centros urbanos (4.153.963 versus 830.718 pobres de zonas rurales). No obstante, en términos relativos, el porcentaje de personas pobres pertenecientes al ámbito ruralduplican a las urbanas (23,1% versus 11,5%, respectivamente) (INDEC, 2010). Si bien estas situaciones de ruralidad y pobreza se presentan como generalidades nacionales y latinoamericanas, se pueden encontrar amplias variaciones en la intensidad del problema a lo largo del territorio nacional, tanto si se comparan regiones como provincias, entre ellas y hacia su interior.El Noroeste Argentino (NOA) junto al Noreste (NEA), son las regiones que forman el Norte Grande, cuyos niveles de pobreza son los más elevados del territorio nacional (Longhi, 2012; Velázquez, 2010; Bolsi y Paolasso, 2009). En este contexto, más precisamente en el NOA, se encuentra Tucumán, la provincia de interés para este trabajo. Tucumán es la provincia con menor superficie y mayor densidad de población de todo el país. Sin embargo, presenta un 19,5% de población rural, superando por más del doble al valor nacional. Esta situación de mayor ruralidad a la media nacional es, a su vez, acompañada por el fenómeno de mayor pobreza (26,6%), presentando un porcentaje elevado en relación al valor nacional y, prácticamente, duplicando al porcentaje de personas pobres urbanas (14,1%).La dualidad tucumana de ser la provincia más densamente poblada del país y, a su vez, duplicar el porcentaje nacional de población rural, muestra por un lado la heterogeneidad de situaciones que existen a lo largo del territorio nacional. Por otro lado, la situación de mayor pobreza que acompaña este escenario rural provincial da cuenta de la necesidad de profundizar en el análisis del fenómeno a escala departamental y de localidades.A partir de esto es que en este trabajo se buscará analizar las transformaciones y persistencias ocurridas en la población rural en los primeros años del siglo XXI. La pregunta que surge es: ¿Que modificaciones sufrieron los grupos poblaciones que viven áreas rurales entre el año 2001 y 2010? ¿cómo fueron sus condiciones de pobreza durante estas 2 etapas?. Metodología: Para identificar y analizar a la población rural se utilizó, como referencia, el Censo Nacional de Población, Hogares y Viviendas de los años 2001 y 2010 (CNPH 2001 y 2010). Estos datos censales permitieron acceder al índice de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) de los hogares rurales de Tucumán. A partir de la información estadística, se elaboró un listado de localidades que habían permanecido en condiciones de ruralidad durante el periodo transcurrido entre ambos registros censales. Se excluyeron las localidades consideradas urbanas en 2001; las que eran rurales y pasaron a urbanas en el 2010, y las rurales en 2010, que no se encontraban diferenciadas de su aglomerado en el 2001, y por lo tanto no se podía acceder a la información de esa localidad, para conocer su índice de NBI. No obstante, las localidades de menor tamaño aparecían registradas, por el Censo, como población rural dispersa, limitando su identificación y análisis. En este sentido, fueron consideradas como hábitats rurales dispersos por departamento, a los fines de analizar su índice NBI y comparar con el resto de las localidades agrupadas.Para sintetizar la situación de las localidades y hábitats dispersos, se calculó el porcentaje de población con NBI que registraban individualmente, tanto en el año 2001 como en el 2010. Estos valores se compararon con los porcentajes de población con NBI a nivel provincial de los respectivos años 2001 (20,51%) y 2010 (13,27%). A partir de esta comparación, se analizó cómo había variado cada unidad geográfica en relación a la media provincial durante ambos censos nacionales. Finalmente, se clasificaron en 4 categorías denominadas A, B, C y D. Resultados: Se encontraron un total de 49 localidades rurales. Además, a excepción del departamento San Miguel de Tucumán, cuya población era exclusivamente urbana, los 16 departamentos restantes presentaron población rural dispersa, haciendo un total de 65 unidades de análisis. El análisis estadístico arrojó un total de 21 localidades que se mantuvieron con valores de NBI por encima de la media provincial en ambos períodos (categoría A). 4 localidades que empeoraron su situación en 2010 respecto del 2001 (categoría B). 7 localidades mejoraron su situación respecto del período anterior (categoría C). Y finalmente 17 localidades se mantuvieron con valores de NBI por debajo de la media provincial en ambos periodos (categoría D).El análisis cartográfico muestra dos zonas críticas en ambos períodos censales (mapas 1 y 2). La primera se ubica al nordeste de la provincia, sobre los departamentos Burruyacu y Cruz Alta, con predominancia de localidades empobrecidas. La segunda zona identificada se ubica al sudoeste de la provincia, sobre los departamentos Río Chico, Chicligasta y el sector occidental de Simoca, con las mismas características.En el mapa Nº3 se observa un agrupamiento de localidades empobrecidas (categorías A y B) en un eje NE ? SO. Mientras que las localidades de categorías C y D, por lo tanto, poseen valores de NBI superiores al promedio en 2010, se distribuyen de manera irregular y aislada, con la excepción de agrupamientos en el sector sudeste de la provincia y en el departamento Monteros.