Literatura, ciencia y política: las polémicas de Manuel González Prada

CRISTINA BEATRIZ FERNÁNDEZ

La Plata

Congreso; Vº Congreso Internacional Orbis Tertius 'Polémicas literarias, críticas y culturales'; 2003

Universidad Nacional de La Plata, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Centro de Estudios de Teoría y Crítica Literaria

Este trabajo se centra en el análisis de los escritos de Manuel González Prada recogidos en sus libros Pájinas libres y Horas de lucha, de 1894 y 1908, respectivamente. Estos volúmenes están constituidos como antologías de conferencias, discursos y escritos periodísticos publicados por González Prada en medios de prensa europeos y americanos o leídos en eventos políticos. Se focalizan, por un lado, las situaciones polémicas que dieron origen a esos textos-intervenciones, ya se trate de polémicas literarias (por ejemplo: la crítica a la tradición representada por Ricardo Palma), políticas (la crisis del Perú tras la guerra con Chile, el antiespañolismo, la defensa de los pueblos indígenas, etc.) o ideológicas en sentido más amplio (anticlericalismo y anticatolicismo, defensa de la educación laica, etc.). Por otro lado, el estudio de esta cuestión requiere analizar las opciones estéticas de Prada tratando de establecer las peculiaridades de su escritura en relación con las filosofías, estéticas e ideologías en que abreva: el romanticismo, el naturalismo y el modernismo literarios, el nacionalismo y el indigenismo, el liberalismo radical y el anarquismo individualista, el cientificismo positivista, el laicismo y el anticatolicismo. Un punto de especial interés resulta la evaluación sobre la literatura contemporánea que formula González Prada, que, conjugada con el cientificismo positivista y con las actitudes políticas del escritor, conduce a la exigencia de una función social para la producción literaria: la comunicación de la verdad (objetivo que entra en conflicto con la concepción esteticista de la literatura, propia de cierta vertiente del modernismo, pero que también distancia a la literatura de la prensa, sobre todo del periodismo sensacionalista, considerado por González Parada una literatura de 'clichés'). A esto se suma el determinismo tan propio de la perspectiva positivista, que lleva a explicar el estilo de los escritores a través de su lugar de origen o de la herencia del idioma nativo, el cual es entendido, metafóricamente, como el hábitat en que se desenvuelve un organismo. De ahí su idea de que las lenguas se comportan como seres orgánicos y de que los males que han 'enfermado' al Perú se han transmitido, en gran medida, por el idioma y la tradición a él vinculada.