INVESTIGADORES
APESTEGUIA Sebastian
congresos y reuniones científicas
Título:
Un especimen juvenil de Araripesuchus butreraensis (Crocodyliformes): nuevos datos sobre su anatomía craneana.
Autor/es:
LIO, G., POL, D. Y APESTEGUÍA, S.
Lugar:
Trelew
Reunión:
Jornada; XXIII Jornadas Argentinas de Paleontología de Vertebrados; 2007
Institución organizadora:
Museo Egidio Feruglio
Resumen:
El género Araripesuchus se encuentra representado actualmente por cinco especies de distribución Gondwánica. A. buitreraensis Pol y Apesteguia, procedente de la localidad “La Buitrera”, provincia de Río Negro (Formación Candeleros; Cenomaniano), se caracteriza por la existencia de un septo coanal completo anteriormente expandido y de sección transversal en forma de “T”, alas pterygoides anteroposteriormente cortas, dentario con surco subalveolar en la superficie lateral y la ausencia de un fuerte escalón alveolar por detrás de la sínfisis mandibular. Todos estos caracteres se encuentran presentes en un nuevo especímen juvenil colectado en la misma localidad (MPCA 323), que permiten referirlo a dicha especie. MPCA 323 aporta novedosa información anatómica sobre la dentición y la región rostral. Los dientes se caracterizan por una pronunciada constricción entre la raíz y la corona bulbosa, desprovista de carenas dentales, a diferencia de A. wegeneri Buffetaut. El rostro es notablemente alargado para ser juvenil, a semejanza de A. tsangatsangana Turner, y posee un amplio foramen premaxilar-maxilar. La fenestra antorbitaria es extremadamente amplia y subcircular, ocupando 1/3 de la longitud total rostral, como ocurre en A. tsangatsangana. Esta abertura está rodeada, sólo en su margen posterior, por una reducida fosa antorbital. Esta combinación de caracteres diferencia a MPCA 323 de los ejemplares juveniles que componen el material tipo de A. patagonicus Ortega et al., procedente de la misma formación. Se refuerza así la validez específica de A. buitreraensis corroborando que las diferencias morfológicas entre el holotipo de ésta y el de A. patagonicus no corresponden a cambios ontogenéticos.