El registro ígneo-metamórfico de la construcción orogénica paleozoica-mesozoica de Patagonia.

ORIOLO, SEBASTIÁN; GONZÁLEZ, PABLO DIEGO; RENDA, EMILIANO M.; MARCOS, PAULO; YOYA, BELÉN; BALLIVIÁN JUSTINIANO, CARLOS A.; SUÁREZ, RODRIGO

Buenos Aires

Jornada; V Jornadas de Comunicaciones del IGeBA.; 2022

Instituto de Geociencias Básicas, Aplicadas y Ambientales de Buenos Aires.

La historia preandina del sector norte de Patagonia abarca una prolongada y controversial evolución tectónica que se extiende mayormente desde el Paleozoico temprano hasta el Jurásico, y que fue sucedida por los principales pulsos de deformación andina durante el Cretácico y Mioceno. En este trabajo, se presenta una síntesis de los resultados obtenidos por el grupo de trabajo enfocados en esta problemática, y se definen también líneas de trabajo futuras y actualmente en curso. Uno de los elementos más discutidos de la evolución geológica de Patagonia ha sido su naturaleza autóctona, para-autóctona o alóctona, la cual se encuentra íntimamente vinculada a la presencia de diferentes orógenos acrecionales y/o colisionales durante el Paleozoico. Con el objetivo de aportar información para resolver esta controversia, se ha realizado un estudio sistemático en diferentes bloques de basamento ígneo-metamórfico, integrando información geológica, estructural, microestructural, geoquímica e isotópica. En las rocas plutónicas de diferentes sectores, se llevaron a cabo análisis geoquímicos en roca total, combinados con datos isotópicos U-Pb y Lu-Hf en circón. Asimismo, se obtuvo información P-T-D-A-t en las rocas metamórficas que se asocian espacialmente a las anteriores. Los resultados preliminares muestran, en su conjunto, dos ciclos principales de deformación, metamorfismo y magmatismo, desarrollados durante el Devónico y Carbonífero-Pérmico, mayormente vinculados a subducción a lo largo del margen proto-Pacífico de Gondwana. Por otra parte, la evolución triásica-jurásica ha sido clásicamente interpretada como el resultado de procesos extensionales, seguidos por el desarrollo de un arco volcánico y la apertura de cuencas sedimentarias asociadas. Sin embargo, trabajos recientes han mostrado la existencia contemporánea de posibles eventos metamórficos de grado bajo a muy bajo. La información obtenida en sectores del basamento noroccidental de Patagonia confirma, por un lado, la presencia de deformación y metamorfismo de bajo grado durante el Triásico, posiblemente vinculados a registros coetáneos en el sector centro-sur de Patagonia. A su vez, se registraron evidencias de deformación dúctil y metasomatismo de alcance regional durante el Jurásico.