Fractura metacarpiana conminuta en potranca SPC: Reporte de caso

ENRÍQUEZ JA; BOLATTI NN; ROSSETTI NS; SIGNORINI P; ODRIOZOLA ME; AYALA L; RICCIARDI ML; SANZ NG; MATHURIN JI

Esperanza, Santa Fe

Jornada; XI JORNADA DE DIFUSIÓN DE LA INVESTIGACIÓN Y EXTENSIÓN; 2024

Facultad de Ciencias Veterinarias UNL

Las fracturas del tercer metacarpiano en el equino se producen a cualquier edad y cualquier raza, peroson más comunes en animales jóvenes. Presentan una configuración variable, abarcando desde unasimple fisura hasta una grave conminuta y pueden producirse en cualquier parte del hueso afectandotanto la articulación proximal como la distal. El metacarpo tiene especial susceptibilidad a la fracturadebido a su localización distal y a la escasa cobertura de tejidos blandos. Este último factor esresponsable de la predisposición a transformarse en fracturas abiertas inmediatamente después deproducida la lesión. 1 El trauma externo en cualquier forma puede causar fractura del hueso de la caña,por ejemplo, patadas y caídas. Cuando los potros son afectados, la causa a menudo es la pisada de laextremidad por parte de la madre, provocando una fractura. La propagación de fracturas por tensión opropagación de fuerzas a través de orificios para tornillos o pasadores de transfijación puede resultar enuna falla completa similar del hueso de la caña. 2Cuando la fractura se compone de fragmentos múltiples y fragmentados, la fijación interna concoaptación externa puede ser insuficiente para evitar que la reparación de la fractura falle.Una forma de fijación esquelética externa que se ha utilizado en animales grandes desde la década de1950, implica clavos transcorticales colocados proximales a la fractura y un yeso que rodea los pasadorese incorpora el pie. Esta configuración permite el soporte de peso axial de las fuerzas que se transferirándesde el hueso proximal a la fractura, a través de los pasadores hasta el yeso, que luego transfiere lasfuerzas que soportan el peso al suelo, por lo que se minimizan las fuerzas en el sitio de la fractura. Estécnicamente simple, requiere instrumentación mínima, se ha utilizado en caballos que pesan hasta 660kilos y se puede utilizar solo o como complemento de los tratamientos de fijación internos. 4El yeso con transfixión es una forma modificada de FSE (fijación esquelética externa) quese ha utilizado para tratar fracturas del tercer metacarpiano, del tercer metatarsiano y de las falanges encaballos. La fijación esquelética externa se utiliza en humanos y animales pequeños para lograr laestabilización de la fractura sin invadir el sitio de la fractura. Este enfoque minimiza la disrupciónvascular y de tejidos blandos durante la reparación de fracturas. También disminuye el potencial decontaminación bacteriana en el sitio de la fractura y la posterior colonización de los implantesortopédicos. La fijación esquelética externa está indicada en caballos para el tratamiento de fracturasdistales al carpo o tarso que no son susceptibles de fijación interna, particularmente fracturas conminutaso abiertas y fracturas asociadas con un traumatismo considerable de los tejidos blandos. La transfixiónimplica la inserción de clavos transcorticales proximales al sitio de la fractura y su incorporación a unyeso que recubre el pie. 3El objetivo del presente trabajo es describir un caso clínico de fractura conminuta de tercer metacarpianoy su resolución por medio de esta técnica, para evidenciar la misma como una alternativa de tratamiento,ya que en estos casos habitualmente se opta por la eutanasia del paciente.Se presentó al Servicio del Hospital de Salud Animal de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UNLuna potranca SPC de 8 meses de edad, perteneciente a la localidad de Rosario del Tala, Entre Ríos. Elmotivo de la consulta fue una fractura metacarpiana en el miembro anterior izquierdo, que había sido estabilizada con un vendaje almohadillado tipo Robert Jones. De la anamnesis se obtuvieron como datos que la lesión se produjo como consecuencia de una patada. A la inspección se observó una notableatrofia muscular en el miembro afectado y la adopción de decúbito lateral completo durante gran parte del día. Se realizaron radiografías de la región de la caña (incidencias latero-medial y dorso-palmar) y se diagnosticó una fractura conminuta del hueso tercer metacarpiano, para la cual de decidió realizar lafijación mediante la técnica de yeso con transfixión bajo anestesia general. El procedimiento se realizóbajo anestesia general parcial endovenosa (PIVA) y consistió en colocar dos clavos en el radio parareducir la tensión en la zona fracturada y vendas de fibra de vidrio (5 vendas de 10 cm de ancho) desdeel extremo proximal del radio hasta el casco inclusive, con la colocación de un estribo, cuya función estransmitir la fuerza desde el casco a través del yeso hacia los clavos insertados en el radio evitando elpasaje de las mismas por el hueso metacarpiano fracturado. Luego de la cirugía se administrófenilbutazona endovenosa (4,4 mg/kg cada 24 hs), gentamicina endovenosa (6,6 mg/kg cada 24 hs) yamoxicilina intramuscular (25 mg/kg cada 12 hs) durante 7 días. Posteriormente se cambió el antibióticoa sulfametoxazol y trimetoprim vía oral (30 mg/kg cada 12 hs) durante 45 días, manteniéndose lapodología de la fenilbutazona. A los 75 días se realizó la extracción de los clavos y cambio del vendajeluego de una evaluación radiográfica para confirmar la presencia de callo óseo. Cabe mencionar que elpaciente permanece hospitalizado hasta el momento con una evolución favorable y a la espera de futuroscontroles radiográficos para eventualmente remover el vendaje de fibra de vidrio y darse de alta.Esta técnica resulta muy útil en fracturas conminutas que no pueden ser fijadas por medio de placas y/otornillos, como alternativa en casos de escasez de recursos y teniendo en cuenta el futuro uso del animalya que la mayoría de las veces se inhabilita al paciente para uso deportivo. Es fundamental seleccionarlos candidatos aptos para poder realizar esta técnica, en base a su docilidad, comportamiento debido aque su aplicación implica la tolerancia y adaptación por parte del animal al uso prolongado del vendajee inmovilización del miembro; así como por tamaño y peso por la resistencia de los materiales utilizados.