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Las lagartijas por ser organismos ectodérmicos presentan una biología muy influenciada por características térmicas del ambiente y propias. De este modo hay aspectos de la biología termal que se suponen coevolucionaron, por ejemplo la temperatura preferida (Tsel), y las temperaturas críticas máximas y mínimas (Ctmax y Ctmin), variables térmicas relacionadas con la distribución geográfica. A su vez características térmicas pueden estar relacionadas con los diferentes modos de vida (reproducción, uso de hábitat, por ejemplo). Se estudio la biología térmica de las especies del grupo boulengeri del genero Liolaemus mediante métodos basados en la estructura filogenético. Se utilizaron tres hipótesis filogenéticas en base a la naturaleza de los caracteres empleados (morfológicos, moleculares y de evidencia total) utilizando entre 28 y 23 terminales. Se encontraron relaciones positivas entre las relaciones térmicas vinculadas a la distribución geográfica coincidiendo con la hipótesis de clima variable. Los resultados esperados en cuanto a coevolución de variables térmicas no fueron positivos, mostrando que estas lagartijas siguen arrojando datos poco esperados. Se cotejo además si existía relación entre la Tsel y la temperatura cloacal obtenida en el campo (Tb), observándose resultados negativos dado que la naturaleza de ambas variables probablemente tengan diferentes comportamientos (histórico la Tsel y local la Tb). Por último se determinó que existen diferencias en la Tsel y su coeficiente de variación entre especies vivíparas y ovíparas, por lo que los consideramos buenos indicadores de la modalidad reproductiva. En tanto que no se observaron diferencias significativas en la Tb ni en la Tsel en función del sustrato ocupado por cada especie.

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