Capítulo III: “Hidrógeno”

MARIÑO, FERNANDO; LABORDE MIGUEL

Combustibles alternativos

Año: 2005; p. 155 - 181

La inserción a escala comercial del H2 como combustible vehicular tendrá que esperar algunas décadas más, a menos que los países desarrollados modifiquen sus políticas, en particular las que se refieren a la captura de CO2. Debido a las dificultades técnicas aun no resueltas en las celdas de combustible, es factible que la primera aplicación masiva del H2 sea en los motores de combustión interna, a pesar de que estos tengan una eficiencia menor que las celdas de combustible. El gas natural aparece como el combustible alternativo al petróleo y como la materia prima más adecuada para generar hidrógeno en el futuro inmediato, aunque ambas aplicaciones impliquen seguir emitiendo CO2 a la atmósfera. Con el propósito de que la celda de combustible, el dispositivo más eficiente y menos contaminante para producir energía conocido hasta el presente, pueda ingresar al mercado en un plazo razonable (siempre pensando en décadas), no solamente se deben realizar esfuerzos en I&D para abaratar costos de fabricación sino que además se debe trabajar en el desarrollo de procesos de producción y purificación de hidrógeno empleando materias primas renovables como así también en el desarrollo de métodos seguros para su almacenamiento y transporte.