INVESTIGADORES
BILENCA David Norberto
congresos y reuniones científicas
Título:
Uso de la tierra y biodiversidad en agroecosistemas de la provincia de Buenos Aires: cambios hacia el interior de la frontera agropecuaria.
Autor/es:
BILENCA, DAVID; CODESIDO, MARIANO; GONZÁLEZ-FISCHER, CARLOS
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; III Congreso Nacional de Conservación de la Biodiversidad; 2008
Resumen:
<!-- /* Style Definitions */ p.MsoNormal, li.MsoNormal, div.MsoNormal {mso-style-parent:""; margin:0cm; margin-bottom:.0001pt; mso-pagination:widow-orphan; font-size:12.0pt; font-family:"Times New Roman"; mso-fareast-font-family:"Times New Roman";} @page Section1 {size:595.3pt 841.9pt; margin:70.9pt 70.9pt 70.9pt 70.9pt; mso-header-margin:35.45pt; mso-footer-margin:35.45pt; mso-paper-source:0;} div.Section1 {page:Section1;} --> En las últimas 2-3 décadas, la conversión de tierras para uso agrícola ha pasado por un período de franca aceleración que se ha dado incluso con intensidad hacia el interior de los límites preexistentes de la frontera agropecuaria, como en la provincia de Buenos Aires. Este proceso de agriculturización ha sido acompañado por cambios tecnológicos (pasaje de la labranza convencional al sistema de siembra directa, mayor uso de agroquímicos, introducción del doble cultivo trigo-soja, entre otros) y generado a su vez una serie de cambios sobre otras actividades productivas como la ganadería, que se restringió en superficie, se intensificó y, en ciertos casos, promovió el sobrepastoreo por aumento de la carga animal. Algunos de los cambios detectados por esta serie de transformaciones ya han sido descriptos (pérdidas de nutrientes del suelo por falta de reposición adecuada, mayores riesgos de contaminación de aguas subterráneas y de cuerpos de agua asociada al mayor uso de fertilizantes y pesticidas, reestructuración en las comunidades de malezas), aunque, de momento, no se conocen debidamente los efectos de estas transformaciones sobre componentes de la biodiversidad, como la fauna de vertebrados. Nosotros iniciamos en 2006 una serie de muestreos de aves que abarcaron 32 partidos de la provincia de Buenos Aires y analizamos la composición y abundancia relativa de pequeños mamíferos (fundamentalmente roedores) obtenidos de bolos de regurgitación recolectados en dormideros de la lechuza de los campanarios (Tyto alba), con el objeto de comparar los datos actuales con los registros históricos publicados (1940-1990) y de inferir así los posibles efectos que la agriculturización podrían haber introducido sobre dichos ensambles. Como resultado de dicha comparación surge, por un lado, que 14 especies de aves terrestres (lo que equivale al 12% del  total de especies detectadas) evidenciaron importantes cambios en su distribución: cuatro especies en retracción y diez en expansión. Las especies en retracción son estrechamente dependientes de pastizales, como el ñandú (Rhea americana) y  el espartillero pampeano (Asthenes hudsoni); por el contrario, las especies que expandieron su distribución correspondieron con aquellas asociadas a cultivos y arboledas/construcciones, como la paloma ala manchada (Columba maculosa), o a especies migrantes asociadas con pastos cortos generados por intenso pastoreo, campos arados o campos disqueados como el batitú (Bartramia longicauda) y el chorlo cabezón (Oreopholus ruficollis). Por su parte, el análisis comparativo de los bolos de lechuza mostró un  significativo cambio caracterizado por un aumento relativo de las especies del género Calomys, numéricamente dominantes en los cultivos, en desmedro de Akodon azarae, la especie numéricamente dominante en los bordes de cultivos, pastizales remanentes y ambientes con vegetación espontánea. Esta serie de resultados indican que la distribución de las aves en los agroecosistemas bonaerenses es la expresión de un proceso dinámico asociado a cambios en el uso del suelo, en particular a la pérdida de pastizales altos y su sustitución por cultivos o, en menor medida, a la mayor intensidad de campos de pastoreo. Al mismo tiempo, los resultados sugieren que la reciente expansión del área cultivada se traduce en cambios que afectan la abundancia y distribución de los pequeños roedores, lo que podría repercutir sobre la estructura de estos ensambles y sobre el riesgo de transmisión de enfermedades asociadas con algunas de estas especies, entre otros aspectos.