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Dos importantes figuras eclesiásticas de la primera mitad del siglo XV ocupan nuestra atención en el presente trabajo: por un lado, Johannes Nider, teólogo y reformador religioso oriundo de Isny, al sur de la actual Alemania; por el otro, Lope de Barrientos,consejero real de Juan II De Castilla y obispo, sucesivamente, en las diócesis de Segovia, Ávila y Cuenca. Siendo, uno y otro, miembros destacados de la Orden Dominica de su tiempo, redactan c. 1440, de modo prácticamente sincrónico, obras de destacado interés para la comprensión de la moderna demonología europea en sus albores. Nos referimos al Formicarius de Johannes Nider, indudable fuente de información del famoso y polémico Malleus maleficarum y a la trilogía de tratados reprobadores de supersticiones de Lope de Barrientos, caracterizada, por el contrario, por su mesura y racionalidad crítica. Se propone, en el presente trabajo, un análisis comparativo de ciertas problemáticas consideradas fundamentales para describir y comprender cabalmente la divergente postura de dichos personajes respecto de las novedosas representaciones crecientemente atemorizantes del diablo y sus servidores, que comenzaban a asomar con inédito vigor en Europa Occidental. Entre tales problemáticas, es posible mencionar la magnitud de los poderes concedidos al demonio en las obras analizadas, la concepción de la divinidad que los autores dejan traslucir, la importancia que cobra el libre albedrío y la voluntad del hombre en la lógica argumentativa de cada autor, el tipo de magia descrita, el contexto de elaboración de las obras en cuestión, las formas de deslegitimación utilizadas para reprobar prácticas y creencias consideradas ilícitas y las autoridades y fuentes citadas en cada caso. Creemos que este ejercicio de historia especular permitirá reconocer tanto las particularidades de las distintas obras analizadas cuanto los lugares comunes existentes entre ellas, en un complejo juego de reflejos y refracciones.

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